Co-creadores de un futuro común
Una de las tres llamadas del Capítulo de 2009 fue la invitación a promover “una nueva relación entre hermanos y laicos, basada en la comunión, buscando juntos una mayor vitalidad del carisma marista para nuestro mundo”. Durante los últimos ocho años, esta llamada se concretizó de diferentes maneras. Ahora necesitamos dar nuevos pasos, para que el futuro del Instituto – como decían los capitulares en 2009 – sea “una comunión de personas en el carisma de Champagnat, donde las vocaciones específicas se enriquecerán mutuamente”.
El Secretariado de Laicos, a partir de la propuesta de la Conferencia General (2013) de profundizar el tema de la Vinculación y pertenencia de los laicos, y la petición del Consejo General, empezó a trabajar, desde 2014, un documento que pretende ser un marco de referencia para la identidad del laico (laica) que se siente llamado a vivir el carisma marista en medio del mundo. Este documento titulado “Ser Marista Laico”– Orientaciones para acompañar procesos vocacionales y proponer itinerarios formativos”, fue ya enviado a los capitulares.
La introducción del documento afirma:
El documento ofrece unos criterios comunes de referencia para la identidad del marista laico. Describe su experiencia personal en relación al carisma, desde su descubrimiento hasta el deseo de acogerlo y comprometerse con él, en comunidad y dentro de la Iglesia. Para acompañar este proceso vocacional se proponen algunas pautas, contenidos, experiencias y medios, que las Unidades Administrativas deben adaptar a su propio contexto, dando espacio a formas diversas que respondan a sensibilidades regionales o culturales. Estas adaptaciones deben permitir, finalmente, configurar itinerarios que respondan a la realidad de cada uno.
Las orientaciones ofrecidas llevan consigo la propuesta de una adhesión carismática y, más aún, una vinculación jurídica, para quien se sienta llamado a ello.
Los criterios comunes aquí presentados pretenden ser como un gran eje transversal que permita a los laicos maristas reconocerse como tales en su identidad e igualmente reconocerse como comunidad a nivel internacional.
Otro documento recibido por los capitulares es el “Proyecto de Vida: en fraternidad”, relacionado con el Movimiento Champagnat de la Familia Marista (MChFM) y es fruto del compromiso del equipo internacional que trabajó en el diseño del proyecto de revitalización de dicho movimiento. Este nuevo documento ha surgido a través de un proceso de actualización del MChFM, después del camino recorrido desde su lanzamiento (1985, XVIII Capítulo General). Por lo tanto, viene de la vida y es para la vida. El texto traza la identidad del MChFM señalando el horizonte al que anhela cercarse.
Según el director del secretariado de Laicos, el Hermano Javier Espinosa, “los dos documentos (Ser Marista Laico y El Proyecto de Vida del MChFM) quieren ser documentos institucionales y, por lo tanto, con la aprobación global del Capítulo General.
Estos dos documentos son acompañados de un tercero. Con propuestas de acciones que desean ser referencias para un caminar conjunto de hermanos y laicos co-creadores de un futuro común.
Estos documentos responden a la propuesta hecha en 2014 por el Consejo General al Secretariado de Laicos para presentar propuestas al Capítulo General. El Consejo pedía una amplia participación de los laicos en dicho proceso. Y, efectivamente, ellos son fruto de la consulta realizada en el Instituto durante el año 2016, a través de las Comisiones Continentales del Laicado, del Encuentro de esas comisiones en L'Hermitage (octubre de 2016) y de los seminarios promovidos en varias provincias del Instituto.