21 de mayo de 2015 ESPAñA

Andando por los ?senderos? de la vida como Hermanos Maristas

Aquí estamos por segunda vez con vosotros, estimados Maristas, hermanos, laicos y laicas de todo el mundo. Somos los quince hermanos y dos formadores que estamos disfrutando del curso de formación Senderos en El Escorial (Madrid), provenientes de nuestras provincias maristas de habla española y portuguesa.

Lamentablemente, ya en la mitad de la vida – y para algunos un poquito más -, el tiempo pasa volando, a pesar de que quisiéramos “frenar” los días y las horas de esta maravillosa experiencia que nos han regalado. Seguimos aprendiendo los unos de los otros, gracias sobre todo a los excelentes animadores de los distintos temas de profundización que estamos viviendo.

Queremos saludaros de nuevo y, al mismo tiempo que os pedimos una oración para cada uno de nosotros, expresaros las bellezas que estamos viendo, escuchando, oliendo tocando y compartiendo en esta maravillosa tierra y primavera del centro de España.

El estilo de vida y las temáticas de formación se van sucediendo de una manera natural y familiar que no cansa sino que se agradece y se desea todavía más. El tiempo personal y el comunitario se entrelazan con caminatas por esta espléndida naturaleza de la Sierra de Madrid, los tiempos de formación organizados de manera muy activa, la interioridad animada por los cantos de los pájaros y una naturaleza exuberante, los tiempos de diversión (películas, deportes, visitas a las maravillas de esta tierra castellana (Segovia, Ávila, Toledo, Cáceres e, incluso, algunas escapaditas de fin de semana a otras zonas de España e Italia (¡!), y, durante la Semana Santa, la vivencia de experiencias pascuales en diferentes puntos de la geografía española y europea.

De nuestros profesores (hombres y mujeres), qué podemos decirles: ¡Una maravilla! Iniciamos con la creación de nuestra comunidad, experimentando, una vez más, nuestra vida como “Historia Sagrada”. La mano maestra de nuestros formadores, HH. Ángel Medina y Joarês Pinheiro, se dejó pronto notar y fue llevándonos por caminos de apertura interior y exterior, casi sin darnos cuenta, experimentando una vez más el amor de Dios en la relectura de nuestras vidas. ¡Qué afortunados somos al poder vivir este regalo que nos da nuestra madre congregación!

Entramos, poco a poco, en unas dinámicas sobre nuestra comunicación y nuestras relaciones comunitarias profundas, en las que nos ayudó la Sra. Maite Melendo; para luego adentrarnos en el reencuentro con la Palabra de Dios en nuestras vidas, guiados por el H. Fernando Arriero, y descendiendo en un viaje al interior, a través del Enneagrama, con el H. Lluís Serra. El Modelo de Ayuda en la Escuela de la Escucha, animado por el H. Joarês, nos dio también muchas luces para poder escucharnos y escuchar a los demás, especialmente a nuestros destinatarios privilegiados: los niños y jóvenes, sus familias y también a nuestros hermanos y laicos, maravillosos compañeros de camino.

A finales de abril, el H. Fernando volvió a estar con nosotros para ayudarnos con una fantástica semana sobre Espiritualidad y Trascendencia: el propio pozo, la creación, el mundo de las relaciones y las heridas del mundo… La espiritualidad contemplativa nos fue conquistando poco a poco con múltiples experiencias de quietud, compartidas desde la vida y el profundo deseo de llevarlas a la práctica desde nuestras propias realidades personales y  comunitarias.

Esta última semana tuvimos el gozo de poder reencontrarnos con nuestro querido H. Seán Sammon que nos animó a amar, desde “un corazón indiviso”, nuestra sexualidad humana y nuestra castidad en el celibato. Hubo tantas preguntas y respuestas que la semana nos pareció cortísima, quedándonos maravillados como siempre maravillados de la sencillez, profundidad y sentido fraterno del H. Seán.

El tiempo nos ha pasado volando y ya hemos recorrido las dos terceras partes de nuestro curso Senderos. Queremos seguir haciéndoos partícipes de la profunda alegría que tenemos de SER HERMANOS, creciendo en la apertura a la gracia de tantos dones recibidos. Orad con y por nosotros para que podamos ser Mensajeros de esta Buena Noticia allí donde la obediencia nos siga enviando.

Os adjuntamos algunas fotos que expresan mejor nuestra experiencia que lo que seguramente hemos sabido transmitiros en nombre de todos los hermanos.

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