Antiguos alumnos del Hispano Americano de Valladolid
Los días 25 y 26 de junio de 2011, un grupo de amigos, que fueran años atrás hermanos maristas y pasaron por nuestras casas del Hispano Americano de Valladolid o de Peñafiel, se reunieron en Mota del Marqués para compartir su amistad.
Es importante señalar que esta ha sido la 31ª reunión de las que se vienen realizando cada año.
El día 25, sábado, fueron llegando de diversos lugares de la geografía española, hacia el mediodía, al destino señalado: Mota del Marqués. Después del intercambio de saludos, nos fuimos preparando para la comida. Sin duda un acto significativo, ya que compartimos lo que cada uno había llevado, como signo de amistad. Una canción nos sirvió de bendición del alimento.
Terminada la comida, vino la sobremesa con canciones del recuerdo, acompañadas de instrumentos de cuerda que vibraban en las manos de los artistas, que nunca faltan.
La tarde de verano caluroso, un grupo la pasó a la sombra, con juegos de naipes entretenidos. Otros, que desconocían el monasterio de las Clarisas, antiguo Palacio, se acercaron a Tordesillas para visitar el lugar turístico. Admirábamos el arte al compás de las explicaciones de la guía.
En uno de los momentos nos pasó a la sala que sirviera de reuniones, nos habló de su bóveda de cañón, de la acústica que tenía y del friso, donde estaba en altorrelieve escrita, en latín, la Salve. Alguno del grupo insinuó a la guía si se podía comprobar la acústica perfecta y el grupo entonó la Salveregina que tantas veces habíamos cantado.
No dejó de ser un momento de vibración espiritual y de gratos recuerdos.
Acabada la visita, nos reunimos en un bar para mitigar el calor con un refresco.
El sábado terminó con una reunión de intercambio. Fueron pasando por la pantalla:
viajes de voluntariado, actividades que realizan los exalumnos maristas de Chile y Perú, que se han reunido en torno al recuerdo que guardan de sus profesores y han emprendido obras de solidaridad donde ellos se encuentran.
El día 26, con la celebración de la Eucaristía en Tordesillas y visita de la ciudad junto al Duero, se pasó la mañana. La comida del domingo en la casa de acogida que tienen las religiosas puso fin al encuentro. La foto de recuerdo deja memoria de la reunión y se habla ya del próximo año.
Para interés de los que no conocen mucho al grupo, les diré que hay inscritos en él 73 amigos, que suelen acudir, sin contar las esposas. En plan de amigos del grupo, cada año suelen acudir tres, cuatro o cinco hermanos que fueron sus primeros educadores.