12 de octubre de 2010 FRANCIA

Como los Apóstoles en el Cenáculo

«Con María, salgamos de prisa hacia una tierra nueva». Las fraternidades de la provincia del Hermitage y algunos amigos, durante los días 25 y 26 de septiembre, han respondido a esta invitación del último Capítulo general, reuniéndose en Nuestra Señora del Hermitage. Con María, así nos lo ha enseñado Marcelino , fuimos invitados, como los Apóstoles en el Cenáculo y los primeros cristianos, a no tener más que un corazón y un alma en este lugar de paz. Partir no se reduce a venir a esta casa porque lo que hemos descubierto en ella nos empuja a seguir caminando, a desplazarnos, de prisa:El sábado a la mañana, la asamblea anual de los animadores y hermanos acompañantes estuvo abierta excepcionalmente a todos. Éstos provenían de las 12 fraternidades presentes. Hemos percibido signos del Espíritu a través de las diversas acciones vividas este año en las fraternidades y hemos compartido en un intercambio sencillo y lleno de motivos para dar gracias a Dios. Diversas acciones de solidaridad bien dirigidas, que van desde encuentros maristas entre diversas fraternidades hasta la apertura a la iglesia local que, en un caso, aportó ocho nuevos candidatos a la fraternidad. La acción perseverante ha sido recompensada. Los frutos del encuentro europeo de Guardamar se podían percibir, cuando se trató de remplazar a un miembro del secretariado, para una nueva tarea en la animación del Movimiento Champagnat en Francia. Al festejar los 25 años de este movimiento, la prueba de su vitalidad estaba allí presente.Partir es también superar el cuadro de nuestras fraternidades para acoger otras realidades maristas laicales: la comunidad ampliada de La Valla Mulhouse, el responsable laico de la tutela marista en Francia y un director de establecimiento, algunos laicos maristas de Cataluña, grupo en el que participa Joan, el arquitecto, algunos laicos ligados a la espiritualidad marista de Jean-Claude Colin (Padres y Hermanas Maristas).La tierra nueva podría estar representada por el Hermitage renovado que cada uno ha podido visitar con un guía y profundizar más específicamente en uno de los 10 talleres del domingo por la mañana. Joan, dejando de lado el enfoque técnico del arquitecto, nos ha transmitido un mensaje lleno de espiritualidad y de generosidad de corazón sobre su propia experiencia en la obra, con la comunidad y las personas de las distintas empresas, que llegaron a formar una simbiosis sorprendente. Los obreros crearon un cartel con un proverbio árabe e inscribieron en él sus nombres. Como laicos maristas de Champagnat nos sentimos verdaderamente en nuestra casa, en esta casa renovada. Gracias a Joan y a toda la comunidad actual.En distintos momentos, los hermanos Antonio Ramalho, delegado del Superior general, Javier Espinosa, del Secretariado de los laicos, venidos los dos de Roma, y el hermano Maurice Berquet, provincial del Hermitage, nos recordaron la historia de la creación del Movimiento Champagnat, de su acompañamiento y de su lugar hoy, después del XXI Capítulo general. La celebración dominical y la comida final, con el pastel de aniversario, han sido tiempos fuertes de comunión para los participantes.Toca ahora a cada uno encontrar las tierras nuevas donde el Señor le espera. Que María y Champagnat les guíen en este discernimiento.________________1. Carta del 24 de agosto de 1835 llamando a los hermanos a reunirse en Nuestra Señora del Hermitage, citada en la invitación.

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