2 de julio de 2010 ESTADOS UNIDOS

?Corazones nuevos para un mundo nuevo?

El fin de semana del Memorial de los Caídos (27-30 de mayo) más de 250 jóvenes, laicos maristas colaboradores y hermanos representantes de las provincias de Canadá, México Occidental y los Estados Unidos se reunieron en el Marist College de Poughkeepsie, New York, para participar en el Encuentro de Juventud Marista 2010. Este encuentro es no sólo una celebración de nuestra identidad marista y de nuestro llamado a seguir las huellas de Champagnat, sino también una oportunidad para que tanto los jóvenes como los adultos puedan ver directamente la diversidad y la riqueza de nuestro mundo marista.

Los estudiantes escogidos para este encuentro han sido identificados por los profesores y la administración de sus colegios como jóvenes que tienen no sólo un potencial como líderes sino también como líderes servidores y agentes de cambio dentro de la comunidad escolar.

En sintonía con el tema del XXI Capitulo General, el comité organizativo pensó que sería apropiado ayudar a los jóvenes maristas a formar en ellos ?Corazones nuevos para un mundo nuevo? para seguir haciendo viva la misión y la visión del Padre Champagnat.

Como parte de la ceremonia de apertura los jóvenes maristas fueron acogidos por el Hermano Ben Consigli, Provincial de los Estados Unidos. En la ceremonia de apertura el hermano Ben dirigió estas palabras a los jóvenes:

?Como jóvenes de esperanza habéis sido elegidos para participar en este encuentro porque demostráis tener las características que indican que sois lideres maristas: amor al prójimo, servicio a los otros, y espíritu de familia. El desafío de crear ?nuevos corazones para un nuevo mundo? y las consecuencias de hacerlo realmente, tendrán un impacto en este tiempo que compartiremos y, así lo esperamos, afectarán a aquellos que vosotros encontrareis al volver al colegio.
En este momento inicial pienso que es importante para nosotros recordar a los primeros seguidores de Cristo, porque si somos verdaderos maristas, somos ante todo y por sobre todo, seguidores de Cristo. Los discípulos de Jesús se debatían con la pregunta sobre cómo continuarían viviendo sin Jesús físicamente presente entre ellos. Es la misma pregunta con la que nos debatimos nosotros hoy en día. ¿Qué podemos aprender de la primitiva comunidad cristiana que luchaba en busca de un sentido después de la partida de Cristo? En estas últimas semanas del Tiempo Pascual, las Escrituras nos han desafiado a tener una relación personal y comunitaria con Cristo Resucitado y a amarnos unos a otros. Como maristas, éstos son los desafíos para nosotros también. Que este tiempo que pasaremos juntos nos permita soñar en un mundo mejor en el que la comunidad y el amor de Dios y del prójimo sean primordiales, y que podamos seguir escuchando en nuestros corazones aquello a lo que Dios nos llama?.

Además de las palabras del Provincial, el hermano Emili Turù, Superior General, que no pudo participar en la reunión, escribió una carta a los jóvenes reunidos y los alentó a ser personas de esperanza, compasión y amor. El hermano Emili comentó además la importancia del tema con estas palabras:
?Querido jóvenes, tenéis en vosotros mismos la fuerza de Dios, la creatividad y el coraje de llevar adelante algo que se está despertando en vuestros sentimientos de plenitud.
Sí, necesitamos nuevos corazones para hacer frente a los desafíos que nos presenta el momento histórico en el que tenemos el privilegio de vivir.
Nuevos corazones en nuestro mundo globalizado:

– Para vivir responsablemente en nuestro hogar común que es nuestra Tierra, de la que todos somos responsables

– Para abrirnos a la internacionalidad y al multiculturalismo, descubriendo la riqueza que hay en esto,

– Para reconocer nuevos hermanos y hermanas más allá de la raza, la religión y la cultura,

– Para hacer que esta globalización se transforme en una oportunidad para la solidaridad en la lucha contra la pobreza,

– Para comprometernos a luchar en nombre de aquellos que son los más vulnerables de este sistema: los niños condenados a la exclusión

– Para seguir proclamando el evangelio liberador de Jesús, con todos los medios que las nuevas tecnologías ponen a nuestra disposición, pero por sobre todo, a través de nuestras palabras y nuestras vidas?.

Durante el fin de semana los alumnos fueron guiados a través de diversas presentaciones. Entre quienes hicieron estas presentaciones estuvieron el hermano Michael Flanigan que habló sobre Marcelino Champagnat y su misión. El Sr. Adam Wouk, Encargado de la Pastoral del Marist High School de Chicago, habló sobre la importancia de servir tal como se sirve en la tradición marista. Finalmente Brad Farmer y Gene Monterastelli, de Apex Pastoral, grupo de animadores de encuentros juveniles, hablaron a los alumnos sobre el don, el desafío y la obligación que tenemos, como maristas, de usar este don para lograr cambiar nuestras comunidades y nuestro mundo.

Además de las presentaciones que se hicieron para todo el grupo, los alumnos pudieron elegir participar en algunos de los talleres de trabajo que se ofrecieron durante el fin de semana. Algunos de los talleres fueron: ?Vivir y crecer como jóvenes maristas?, ?Desarrollar y fortalecer nuestro llamado a ser líderes servidores?, ?El Evangelio según Hollywood?, ?La oración por medio del movimiento?, ?Caminar por el laberinto: el viaje de la fe?.

Para que los participantes se divirtieran y se conocieran unos a otros se los dividió en pequeños grupos para discusiones y también para los ?juegos Champagnat?.

Como conclusión del fin de semana, el hermano Al Rivera, Director de la Pastoral juvenil Marista para la Provincia de los Estados Unidos, junto con los hermanos Steve Milan, Director de la Pastoral de jóvenes adultos y el hermano Dominick Pujia, así como todos los adultos presentes, enviaron y bendijeron a los jóvenes y les recordaron su responsabilidad de ser la luz de Cristo para los otros. Como parte de la clausura cada estudiante recibió una pequeña lámpara para recordar no sólo la experiencia que habían tenido sino también, lo que es más importante aún, para recordar que Cristo está siempre presente y que ellos son esa luz para los otros. Como dice Mateo 5,16: ?Brille así vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos?.

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