11 de agosto de 2011 ESPAñA

El carisma marista planea sobre Buitrago

Los símbolos para los jóvenes, y para los mayores, son lenguaje que hay que escuchar en silencio. Eso es lo que ocurrió al iniciar el Encuentro Internacional de Jóvenes Maristas reunidos en Buitrago. Se hizo el silencio. Y comenzó la actividad interior. La careta fue el recurso utilizado por los animadores para introducir la reflexión del encuentro. La careta y el corazón. El símbolo del corazón ha estado permanentemente presente, como recurso y como actividad. Se valoró mucho la actitud del corazón. Con estos referentes se hizo la pregunta a cada uno de los participantes: ¿Quién eres?

En la gran sala de este Centro de Estudios de Santa María del Castillo se improvisó un escenario con cubos de cartón de grandes proporciones. El conjunto de piezas constituía un rompecabezas. Con una música de fondo comenzó la acción. El actor principal fue introduciendo en escena cuatro actores que colaboraron con él. De los cubos, que con su disposición desordenada simulaban una gran roca, comenzaron a salir chorros de agua. Con la magia del teatro el caudal de agua surgido de la roca se transformó en personaje: “el carisma marista” se materializó ante los ojos de los espectadores. Animado por las manos habilidosas de los artistas, este personaje recién nacido a los ojos de los espectadores en forma de títere, fue implicando en la acción a todos los participantes.

Este recurso teatral creó en los participantes la conciencia de que compartían una motivación común que anima todas las obras maristas del mundo. “Nos hemos reunido aquí porque nos une el espíritu de Marcelino”, comentaba a mi lado, una muchacha rubia, flaca, esbelta. Y el animador decía desde el micrófono: “Ya éramos una familia antes de llegar aquí; pero ahora se ve que realmente somos una familia”.

Con esta ambientación se comenzaron las presentaciones en grupo. ¿De dónde vienes? ¿Qué actividades se realizan en la obra marista en la que tú trabajas? Aparecieron nuevos símbolos que identifican a los grupos de trabajo y reflexión.

La primera jornada introductoria se completó a la mañana siguiente con los interrogantes que planteó el hermano Emili Turú, Superior general, al inicio del día: ¿Para qué estamos aquí?

Partiendo de algunos acontecimientos duros, dolorosos, sangrantes, de nuestra realidad mundial comprobó que si miramos hacia fuera vemos grandes problemas. Algo parecido a lo que ocurrió en la época de Champagnat. Pero Marcelino dio una respuesta. Su compromiso se expresó en gestos sencillos. Nosotros hoy somos parte del problema del mundo por lo que hacemos o por lo que dejamos de hacer. Con nuestra respuesta hemos de construir una Iglesia de rostro mariano. Y, a continuación, planteó la pregunta: ¿Cómo hacerlo? Poniéndonos a la escucha atenta de lo que ocurre a nuestro alrededor. Especialmente poniéndonos a la escucha atenta de lo que dice el Espíritu Santo.

Toda la actividad del día tuvo su punto culminante en la misa, animada por el padre Pedro García. El mantel del altar era un tupido cuadro multicolor compuesto con los dibujos que cada uno había hecho poniendo de relieve lo que había dentro de su corazón. Toda la actividad de los talleres, realizados durante la tarde, y el fruto del largo tiempo de silencio que precedió a la eucaristía, estaba recogido en ese tapiz de actitudes internas. El acto penitencial fue una invitación a analizar las máscaras que ocultan la verdad de nuestras vidas. Y las máscaras que nos ocultan la dura realidad del mundo. La Palabra de Dios propuso a los participantes construir las actitudes del corazón sobre cimientos sólidos, sobre roca. En un momento abierto para compartir lo que cada uno llevaba en su corazón, algunos de los participantes explicaron los signos utilizados en sus dibujos para expresar lo que encierran en su corazón joven.

En una sala del recinto donde se realiza el encuentro la ONG SED ha montado una  exposición con fotografías que reflejan la realidad dura de nuestro mundo. Este recurso ha servido de apoyo a varios talleres de solidaridad que se desarrollaron durante la tarde.

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