El Volcán de Fuego
Tras la erupción del Volcán de Fuego – a unos 50 kilómetros de la capital de Guatemala – el 3 de junio, la provincia de América Central ha confirmado que las instituciones maristas se encuentran fuera de peligro.
“Como Maristas, confirmamos nuestro compromiso con la solidaridad y apoyo al pueblo de Guatemala desde nuestras diferentes realidades provinciales y pedimos mantener en sus oraciones a todas las familias que se han visto afectadas por el desastre”, agregó el comunicado el 4 de junio.
El provincial de América Central, el Hermano Hipólito Pérez, indicó a la oficina de comunicaciones de la casa general el 4 de junio que “nos ha sorprendido de nuevo esta catástrofe nacional (…) no estaba prevista, ni había ninguna prevención de emergencia”.
“De las comunidades, hermanos, familia de hermanos y laicos que trabajan con nosotros, centros educativos, hasta el momento, todo tranquilo y sin nada que lamentar”, agregó. “Ahora el llamado de nuevo es la solidaridad y la comunión marista con la gente que está sufriendo”.
La erupción del volcán, la más violenta en cuatro décadas, ha resultado en al menos 69 fallecidos y 46 heridos. Miles de personas están siendo alojadas en refugios temporales.
El volcán arrojó corrientes de material incandescente en las zonas aledañas y una lluvia de ceniza sobre la capital del país centroamericano.
Los vulcanólogos informan que la erupción, que envió cenizas de hasta 10 km al cielo, ha terminado por el momento.