
Fiesta patronal del Instituto
Laudetur Jesus Christus. La jornada festiva en torno a la buena Madre, en el día de su fiesta, se iniciaba como punto final del encuentro. La oración de la mañana fue un signo de comunión con todo el Instituto.
La despedida concluye con un hermoso capítulo de gratitud. Gratitud para con Dios que nos ha obsequiado con esta hermosa experiencia. Gratitud para con los responsables de la casa que nos ha acogido. Gratitud para con los que han organizado el encuentro. Gratitud para quienes han estado detrás apoyando las realizaciones. Un “gracias” enorme para todos porque el encuentro ha dado plena satisfacción.
Y, antes de marchar, un momento de reflexión para concretar el compromiso. Distribuidas por el jardín, colgadas de un soporte, se podía contemplar una hermosa colección de fotografías que recordaban la realidad de nuestro mundo. Eran ventanas abiertas a la cruda realidad que hay más allá de Buitrago, en otros ambientes de vida. La mirada de los jóvenes se detiene en algunas que les tocan particularmente en su interior. Estos signos interpelan nuestro compromiso. Id y contad lo que habéis visto y oído.
En la sala de reuniones se han colocado en el suelo unos trozos de papel de grandes dimensiones. Cada participantes va a dejar sobre ellos la huella de su mano. Es el signo de su presencia en el encuentro y del compromiso que acaba de formular en su interior.
El hermano Joao Carlos do Prado, Director del Secretariado de Misión, anunció que el próximo Encuentro Internacional de Jóvenes Maristas se celebrará en Río de Janeiro en las fechas en que se convoque la Jornada Mundial de la Juventud y será organizado por las provincias maristas de Brasil . Concluye así el Encuentro Internacional de Jóvenes Maristas celebrado en Buitrago.
La fiesta continuó en el colegio de San José del Parque. Allí habían acudido los participantes procedentes de Tui, Barcelona, Alicante y Buitrago. Más de cuatrocientos jóvenes acompañados por un nutrido número de hermanos maristas. A las seis de la tarde se inició la misa. En ella el hermano Emili Turú, Superior general, expresó algunas de las intuiciones de lo que está diciendo el Espíritu a través de los jóvenes maristas reunidos durante estos días en España. “El carisma marista está vivo y es fuente de inspiración para miles de jóvenes en los cinco continentes”, dijo.
Los hermanos brasileños, que han asumido ya la responsabilidad de organizar el próximo Encuentro Internacional de Jóvenes Maristas, entregaron un gran icono a un representante de cada uno de los continentes para que peregrine por las obras y casas maristas como preparación al próximo encuentro en Río de Janeiro.
La misa se celebró con signos muy emotivos que propiciaron la participación de los jóvenes. El rito de la paz suscitó un mar de rostros pintados que manifestaban la sintonía interior de los presentes. Y al concluir se repartió el pan bendecido, un rito propio de la iglesia bizantina, muy querido por los representantes de Siria y Líbano presentes en el encuentro.
La jornada concluyó con una cena al aire libre en los patios del colegio San José del Parque seguida del festival musical del conjunto Kairoi. Los jóvenes pudieron cantar y bailar al son de las melodías que este grupo ha hecho más populares entre los jóvenes maristas.
Concluye así nuestra crónica informativa de este evento. Ponemos aquí punto final a esta fase marista de la Jornada Mundial de la Juventud y nos involucramos de inmediato en otra dinámica que tendrá como centro de información a los jóvenes que se encuentran con el Papa en Madrid.