
Hermanos y laicos juntos
Del 12 al 14 de febrero, se realizó un fin de semana de profundización vocacional marista en Les Avellanes (Provincia LHermitage). Era la segunda vez que se hacía -la primera fue el año anterior- volviendo a ser una experiencia muy enriquecedora, que ha sorprendido y ayudado a tomar conciencia de una realidad ya existente pero, de alguna manera, oculta.
En un ambiente de naturalidad y de familia, 11 hermanos y 10 laicos han podido compartir con gran sencillez, transparencia y con el corazón en la mano, aquello que los une en el caminar de cada día. A pesar de realizar cada uno de ellos actividades muy diferentes, la vivencia del carisma marista como don recibido y entregado en lo cotidiano, los ha puesto en contacto con la vida que todos ellos llevan dentro. Como en la Visitación de María, donde las vidas de María e Isabel se reconocen y se alegran, esta experiencia es un nuevo punto de referencia en el caminar conjunto de hermanos y laicos.
Participantes y algunos ecos
Los participantes de esta experiencia han sido los laicos Marta Portas, Mercè Caminal, Jesús Pujol, Mar, Carles Plana, Bea Fernández, Teo Plana, Lluís Arumí, Maite Pauls, Dolors Comes i Joan Puig-Pey, y los hermanos Jaume Parés, Toni Torrelles, Isidoro García, Marcelo Montori, José Luis Melgosa, Inocencio Martínez, Enric Carreras, Eladio Gallego y Manel Castillo. También participaron los hermanos Fernando Hinojal, de la provincia Mediterránea, y Georges Palandre, que forma parte de la nueva comunidad mixta de LHermitage. Su presencia ha sido una de las grandes riquezas de este fin de semana.
Algunos de ellos han querido compartirnos algunos testimonios, nacidos desde el corazón. ¡Gracias por transmitirnos esta experiencia de vida!
? Ha sido un fin de semana muy agradable. A nivel personal, he podido desconectar del día a día. El momento personal del sábado por la mañana ha sido fantástico. También estoy muy contenta por el compartir. Me alegra comprobar que los hermanos y los laicos no somos tan diferentes. Quizá las diferencias están más en la forma que en el fondo… quién sabe… seguiré pensando en ello. Experiencia para repetir y recomendar.
? Estos dos días han sido preciosos para mí. He podido constatar que el Espíritu está presente y soplando fuerte. Está empujando una nueva vida: la vida del carisma marista, reflejada en la vivencia conjunta de laicos y hermanos. Estamos llamados a vivir una misma realidad y a vivirla juntos.
? Sorprendente, enriquecedor. La experiencia me ha ayudado a centrar, nuevamente, puntos importantes de mi vida. Me ha permitido encontrar las palabras adecuadas para decir lo que siento y vivo, en el momento justo y con las personas adecuadas. Muy agradecido. Con un tono muy marista y con el privilegio de encontrarnos con hermanos, laicos y laicas de sensibilidades parecidas de otras latitudes (Francia). ¡Un regalo!
? Es mi segunda experiencia de ?fin de semana vocacional?. Esta vez ha sido una experiencia ?nueva?. Me he sentido acogida, como en casa. He visto, contemplado, la vivencia de cada uno (mayores y jóvenes, laicos y hermanos, hombres y mujeres) y en todos he captado interés por el encuentro y una franca participación. Me encontré bien entre los otros. No quiero pensar más en las estructuras, en el camino del laicado. Salgo con la CONFIANZA: ORAR y CONFIAR.
? El fin de semana ha renovado mi compromiso de seguir a Jesús desde un carisma concreto, el de Marcelino Champagnat. Y esta opción se ha de vivir desde la vida compartida: LA COMUNIDAD. No sé cómo ni de qué manera, pero Jesús me llama a esto. Jesús me dice como al sordo del Evangelio: ?¡EFFATÁ!? (Ábrete).
? Me he sentido muy bien durante esta convivencia, pudiendo compartir la fe. Me ha resultado muy estimulante ver que otras personas siguen por el mismo camino y quieren llegar hasta el final. No me resulta tan satisfactorio tener que vivir, en el día a día, sin personas tan comprometidas como las aquí presentes, pero seguiré compartiendo amistades y servicio esperando que el Señor nos ayude a encontrarnos.
? Excelentes, las personas que he encontrado. Excelente, la dinámica seguida. Excelentes, los animadores del encuentro. Los laicos pueden seguir su llamada al carisma marista con una formación como ésta.