20 de febrero de 2017 ESPAñA

Hermitage, Escuela de Educadores

Ya son quince las promociones de educadores de los centros maristas de la Provincia Compostela que tienen la experiencia de cuatro semanas de formación a lo largo del curso escolar y una quinta semana en verano en el Hermitage.

A principio de noviembre comenzaba la decimoquinta promoción de “Hermitage, Escuela de Educadores” (HEE), formada por 29 educadores. La primera semana de esta experiencia en Roxos, Santiago de Compostela, y el sábado 4 de febrero finalizaba en Miraflores, Burgos, la segunda semana de formación.

El HEE es una oportunidad única para descubrirse a sí mismo, encontrar el sentido a la Vida, del trabajo, de la propia vocación en el seno de la familia marista. 

A partir del conocimiento de uno mismo y del acercamiento a la persona y a la experiencia de Jesús el grupo reflexiona sobre su misión como educadores maristas y toma conciencia de que la Escuela que evangeliza es la escuela que es Buena Noticia en sí misma, por el ambiente que se respira, por las relaciones que se generan, por lo que se dice y lo que se valora y por cómo se cuida lo importante: la dignidad de cada una de las personas.

En palabras de alguna de las participantes el HEE es “una experiencia muy buena, llegas cansada por diferentes motivos que forman parte de tu día a día y allí los dejas en apartados para cuidarte, conocer nuevas personas, experiencias que te enriquecen como persona y docente. Te paras a pensar en ti y en cosas que te gustan. Para mí fue un parón que necesitaba en el momento más adecuado”. 

Otro de los profesores dice que “me ha permitido poder conocer, no solo a compañeros de otros centros y a los acompañantes, sino algo más de mi profesión y de mí mismo. El poder tener esos momentos (aislado de la vida cotidiana) ayuda a ver muchas veces las cosas (profesionales y personales) con más perspectiva. Y en ello los acompañantes y hermanos habéis tenido mucho (o mejor dicho "todo") que ver. Espero con ganas la siguiente semana.”

Y, para terminar, en palabras de otra de las participantes, Hermitage, Escuela de Educadores es una experiencia en la que “si vuelvo la vista atrás tras la primera semana, el HEE está siendo un regalo para mí.  No sólo por las nuevas amistades sino por ser una semana de crecimiento personal.  Ha sido un desconectar de la vida diaria y rutinas para conectar conmigo misma. Por primera vez me he sentido de verdad Marista. Gracias por todos los momentos vividos en familia.

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