XIII Capítulo – 1932, Grugliasco (Italia)

Contexto 1  

Entre las dos guerras mundiales hubo grandes y penosas persecuciones contra la Iglesia, especialmente en México, Alemania y España en las que estuvo envuelto el Instituto.

Las doctrinas comunistas, liberales y capitalistas dieron pie a que apareciese una serie de encíclicas papales (la Rerum Novarum de León XIII, se publicó en l891) que poco a poco fueron formando un cuerpo de Doctrina Social de la Iglesia.

Convocatoria

Concluidos los doce años de generalato del hermano Diogène, el Capítulo general se debía reunir de nuevo al cumplirse el plazo señalado por las Constituciones. Este Capítulo se celebró en Grugliasco,2 del 16 de mayo al 6 de junio de 1932.

Como para el Capítulo de 1920, se obtuvo de la Santa Sede un indulto autorizando la atribución de elegir un solo representante para las provincias con 150 profesos perpetuos (de las 24 provincias existentes entonces 13 estaban en este caso), y elegir un miembro delegado al Capítulo de la Vice-provincia de Nueva Caledonia y los dos distritos de Alemania y Perú-Chile.
Asistieron 74 capitulares, en lugar de los 61 del Capítulo anterior, pero poco antes de la apertura del Capítulo, el 12 de mayo, el hermano Marie-Alypius, diputado de Brasil Norte, murió en Martinet (Gard), de una congestión pulmonar.3 Su muerte redujo a 73 el número de capitulares, porque ya era demasiado tarde para llamar a su suplente.4
Las paredes de la sala capitular estaban decoradas con la fotografía de todos los miembros del Régimen ya fallecidos, desde el origen del Instituto, en número de 26. A estos cuadros se añadieron los retratos de los hermanos Angelicus, Columbanus, Candidus, Pierre-Joseph y Dalmace, lo que hace número total de 31.5

Incidencias

Del 16 al 23 de mayo, tuvo lugar el retiro de apertura predicado por el eminente padre Balmès OMI. El 24 de mayo de  1932, el hermano Diogène fue reelegido Superior general por una imponente mayoría. Se celebraba la fiesta de María Auxiliadora y el cumpleaños de su primera elección. Era necesario que esta reelección fuera confirmada por la Santa Sede. Se solicitó por telegrama y llegó esa misma tarde y, con gran alegría de todos”6.  

“El 25 de mayo, tras la proclamación oficial del nuevo Superior general, en la cena hubo varios parlamentos en los que intervinieron alternativamente los representantes de los diversos idiomas hablados en el Instituto mediante una pequeña improvisación de algunos minutos: el hermano Constantien, decano de los Provinciales, en francés, el hermano Germanus, en nombre de los hermanos de habla inglesa, el hermano Sixto, en español, el hermano Marie-Chrysophore en portugués, el hermano Raffaele en italiano, el hermano Joseph-Vérius en alemán, el hermano Marie-Nizier en chino, el hermano  Henri-Gustave en flamenco, el hermano Nicostrato, en catalán, y así hasta 14 idiomas, a los que el Reverendo Hermano, que hablaba o entendía casi todas estas lenguas, salvo el chino, respondíó muy oportunamente, en francés, con una palabra cariñosa para cada uno”.7

En el saludo, que le dedicó la comunidad de la Casa general, después del rezo del rosario, se hizo alusión a las elecciones de 1825 con la presencia de Courveille: "A cien años de distancia, con la única diferencia de que aquí no hay ningún Courveille que mire las cosas con mal ojo, el Capítulo de 1920 os nombró nuestro Superior, y el de 1932 ha venido a ratificar, doce años más tarde, la misma decisión, mediante la novedad de un voto de confirmación exigido por la Santa Iglesia. … Feliz nuestro Instituto, en el que el Superior general ha tenido tanto éxito en 1932 como el Padre Champagnat en 1825, para conseguir el voto de confianza de sus hermanos.”8

El viernes 27 de mayo de 1932, los hermanos Asistentes fueron reelegidos y mantenidos en sus funciones: hermanos Flamien, Michaélis, Elie-Marie, Agostino-Joseph, Marie-Odulphe, Euphrosin, Clément y Francesco de Borgia. El hermano Luis-María, Ecónomo general y el hermano Jean-Emile, Secretario general desde 1929, también fueron confirmados en su cargo, en primera vuelta y con gran mayoría de votos.

Praxis capitular

Votar en una Asamblea de 73 miembros no es un asunto sencillo. Veamos cómo se hace. En primer lugar existe la votación a mano alzada. En la mayoría de los casos, en que es suficiente obtener el apoyo del Capítulo sobre los asuntos en los que parece de antemano que todos opinan lo mismo, el presidente solicita este tipo de voto. Los capitulares levantan la mano y el resultado se puede contabilizar en un instante. En caso en que algunos se abstengan, el presidente solicita de nuevo que levanten la mano los que se oponen. Y  de esta manera se juzga de inmediato de qué lado está la mayoría.
Voto blanco o negro.  Cada uno de capitulares está equipado con una pequeña caja donde se ha depositado un puñado de alubias blancas y otro de alubias negras; a la hora de votar blanco o negro, los escrutadores recorren la sala recogiendo los votos en una urna y cada capitular deposita la alubia del color que quiere. De regreso a la mesa central, los escrutadores vierten el contenido de sus urnas sobre la mesa y, en breve, todos los capitulares pueden ver el resultado. Los escrutadores cuentan las alubias de cada color  en voz alta delante de todos; si el total coincide con el de capitulares votantes los secretarios anotan el resultado.
Voto mediante papeleta escrita. –Este método se aplica especialmente en las elecciones. Cada Capitular escribe en una papeleta el nombre de la persona a la vota y luego se dobla la papeleta en cuatro dobleces. A continuación se introduce en la urna. Los escrutadores, colocan sobre la mesa el contenido de las urnas y cuentan las papeletas en voz alta.  Si el número de papeletas coincide con el número de votantes se procede a leer en voz alta el contenido de las papeletas, mientras que los secretarios anotan, cada uno en su lista, los votos obtenidos. Terminada la lectura de las papeletas se proclaman los resultados.
La elección del Superior general y de los otros miembros de la administración central del Instituto se han elegido en este Capítulo por este procedimiento”.9

Decisiones

Concluidas las elecciones, el Capítulo se dedicó a otros asuntos importantes relacionados con el Instituto. Este trabajo lo llevaron a cabo las diversas comisiones, presididas cada una de ellas por un Hermano Asistente general.10 El hermano Emery, Procurador general ante la Santa Sede, expuso la historia de las causas de beatificación, desde su introducción hasta la fecha del XIII Capítulo general.11 Las llamadas del capítulo están contenidas en 25 estatutos capitulares. Los resúmenes de estos trabajos y las decisiones del Capítulo ocupan sesenta páginas de la Circular del 5 de agosto de 1932.12 El Boletín de 1Institut, en su número 89, correspondiente a julio de 1932,13 bajo la pluma del hermano Jean-Emile, con estilo vibrante y alegre, dedica no menos de treinta páginas, ilustradas con fotografías, para ofrecer a sus lectores "un abundante informe del Capítulo general”.


1 Bulletin de lInstitut, T. 13, p. 112-143.

2 Circulaire du 7 octobre 1931, T. 16, p. 623-657

3 Circulaire, T. 16, p. 624-625 y 671.

4 Bulletin de lInstitut, T. 13, p. 118.

5 Bulletin de lInstitut, T. 13, p. p. 114

6 Nos Supérieurs, E. Vitte, Lyon, 1953,  p. 380.

7 Bulletin de lInstitut, T. 13, p. 130

8 Bulletin de lInstitut, T. 13, p. 131-132.

9 Bulletin de lInstitut, T. 13, p. 120-121

10 Circulaire T. 16, p. 676-677.

11 Circulaire T. 16, p. 677-701.

12 Circulaire T. 16, p. 706-762.

13 Bulletin de lInstitut, T. 13, p. 112-143.