26 de junio de 2009 CASA GENERAL

Llamada al XXI Capítulo general

Este pequeño documento, firmado por todos los participantes en las dos experiencias de formación conjunta de Quito (1-30 julio 2008) y St. Paul Trois-Châteaux (24 abril ? 17 mayo 2009), termina con unas peticiones y recomendaciones al XXI Capítulo general. Creemos que pueden ayudar a discernir las llamadas que el Espíritu está haciendo al Instituto en este momento histórico.

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Estimados hermanos y laicos participantes:

El 20º Capítulo general expresaba: Estamos convencidos de que el Espíritu de vida nos conduce en este camino común? Nos comprometemos a promover experiencias y procesos de reflexión conjunta que nos lleven a profundizar en nuestra identidad marista y a perfilar distintas formas de pertenencia al Instituto. Ello implica procesos de formación conjunta de hermanos y laicos (Optamos por la vida, 29).

Desde entonces, la Administración general ha animado diversas experiencias de formación conjunta: Les Avellanes (2007), Asamblea internacional de Mendes (2007), Quito (2008), St. Paul Trois-Châteaux (2009) y Chosica (2009). Muchos hermanos y laicos ya han experimentado la riqueza de este nuevo tipo de formación y están iniciando procesos similares en sus provincias y distritos.

Conscientes de que la vitalidad de nuestra familia religiosa y la fidelidad a su misión dependen, en gran parte, de la formación de sus miembros (C. 95), estamos convencidos de que la formación es la mejor inversión que puede hacer el Instituto de los Hermanos Maristas, con la novedad de que ahora integramos en ella a los laicos y laicas que se sienten llamados también a ser maristas.

El futuro del carisma marista hace relación a este camino compartido de hermanos y laicos, por eso, queremos compartirles una síntesis de aquello que hemos vivido y reflexionado juntos en las experiencias antes citadas.

Constataciones desde las experiencias vividas:

 La vocación marista es un don de Dios que se ofrece a personas comprometidas en formas de vida diferente, que quieren vivir el Evangelio según el carisma marista. No puede haber vocación marista sin misión, sin espiritualidad y sentido de comunidad.

 La formación conjunta quiere expresar que laicos y hermanos nos sentimos recíprocamente necesitados para desarrollar nuestra identidad marista común y nuestras identidades específicas.

 Supone procesos: itinerario, andadura, etapas, sistematización? más que acciones puntuales o programas sin visión.

 Son procesos comunitarios, pues la identidad marista que queremos recrear es para ser vivida en comunidad, ya sea de hermanos, laicos, o hermanos y laicos. Pero sólo pueden darse verdaderos procesos comunitarios si nacen de procesos personales. Se parte de la persona y se complementa en la comunidad.

 Es, principalmente, experiencia vital, y debe preparar para compartir vida, fe, misión, carisma, experiencias comunitarias, discernimiento en común?

 La finalidad de toda formación conjunta es promover la vitalidad del carisma marista: misión, espiritualidad, vida compartida?

Toda comunidad marista debiera ser formadora y sentirse llamada a compartir esta formación con otras personas.

Debemos, pues, tomar conciencia de la necesidad de un nuevo tipo de formación marista que, sin negar la formación específica de hermanos y de laicos, tenga en cuenta la riqueza de la complementariedad de la formación conjunta. Así como la misión y la espiritualidad deben ser compartidas, lo mismo ocurre con la formación marista.

Las experiencias vividas nos permiten afirmar que la formación conjunta no lleva a una confusión de las identidades específicas, sino a un enriquecimiento de las mismas. El Espíritu parece decirnos que no encontraremos la verdadera identidad de la vida religiosa y de la vida laical marista separadamente: se necesitan una a otra. Los signos del Espíritu comunes a todos estos encuentros, han sido la alegría, la oración profunda y el compromiso por la vocación marista. Ellos son garantía de todo camino de revitalización del carisma.

Por lo cual, pedimos al Capítulo general que recomiende y tome decisiones que ayuden a:

1. Desarrollar procesos de formación conjunta de laicos, laicas y hermanos en todas las unidades administrativas (UA).

2. Promover la creación de nuevos modelos de vida y misión compartida, hermanos y laicos, que sean núcleos comunitarios de referencia para la vitalidad del carisma y la corresponsabilidad en la misión, tanto en las UA como a nivel de Instituto.

3. Continuar animando la reflexión sobre una nueva formación marista, conjunta y específica, que contemple tanto la riqueza de las identidades específicas como la complementariedad de las mismas. Caminar hacia una nueva Guía de formación marista, que incluya las diferentes formas de vivir el carisma marista.

4. Que la nueva Administración general continúe asumiendo un rol activo en la formación de formadores maristas, hermanos y laicos, para esta formación conjunta y específica.

5. Promover, en diversos lugares del Instituto, la vivencia (ad experimentum), entre los laicos interesados, de distintas formas de compromiso con el carisma marista, de modo que en los próximos años un buen número de UA hayan iniciado experiencias significativas, que permitan una mayor corresponsabilidad y toma de decisiones conjuntas, hermanos y laicos, sobre la vida y la misión marista.

6. Continuar desarrollando, a través de la Administración general y su interacción con las UA, ?nuevas formas? de comunicar la ?vida nueva? que ya está naciendo en el mundo marista. No se trata sólo de una cuestión técnica sino que comprende, sobre todo, una mejor articulación del laicado más comprometido y su conexión vital con las comunidades de hermanos, para lograr una visión internacional de mayor comunión con el carisma marista.

7. Desarrollar programas de formación que acompañen a los jóvenes adultos en el discernimiento y compromiso de su vocación.

Firmado por:

Los participantes de las experiencias de formación conjunta de Quito y Saint-Paul-Trois-Châteaux

Administración general
H. Javier Espinosa
H. Pau Fornells
H. Teófilo Minga

Amazonia
H. Valdir Gobatto

América Central
H. Luis Carlos Gutiérrez
Sr. Sergio Pérez

Brasil Centro Norte
Srta. Rita Rocha
H. Wagner Cruz

Brasil Centro Sul
H. Anacleto Peruzzo
Srta. Lúcia Coelho

Canadá
H. Réal Sauvageau
Sr. Robert Giguère
Srta. Véronique Dumais

Compostela
H. Carlos Hernández

Cruz del Sur
Sr. Marcos Denevi

East Asia
H. Chinthana Nonis
Sra. Kamala Xavier

Europa Centro-Oeste
Srta. Marie Paul Stevens
H. Michael Schmalzl

Ibérica
Srta. Ana Sarrate
H. Ernesto Tendero

L?Hermitage
H. Bernard Régis
H. Jaume Parés
H. Jean Pierre Destombes

Mediterránea
Sr. Juan García

México Occidental
Srta. Cecilia Cortez

Melanesia
H. Donovan Tami

Norandina
Srta. Claudia Rojas
Sra. Cristina Ángel

Paraguay
Francisco Romero

Rio Grande do Sul
Sérgio Schons

Santa María de los Andes
Srta. Mónica Aguirre

Sydney
Sra. Carole Wark
H. Michael Callinan
Sr. Tony Clarke

USA
H. Hank Hammer
Sr. Vincent Andiorio

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Nota: Si quieren disponer de los documentos finales de Les Avellanes, Quito y Saint-Paul- Trois-Châteaux

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Roma, 21 de junio de 2009

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