Carta a Marcelino
P. Pierre Rigaud
1837-03-10
El P.Pierre Rigaud S.J. fue el Superior de la comunidad jesuita de La Louvesc de 1833 a 1840. Al mismo tiempo desempeñaba la función de párroco. La Louvesc era importante centro de peregrinación religiosa, a causa del túmulo de St. Juan Francisco Régis, Santo de gran popularidad en todo el región sureste de Francia. Recordemos que Marcelino Champagnat, en compañía de la madre, hiciera una peregrinación al túmulo del Santo al final de su primer año de seminario. Ese texto del P.Rigaud es la segunda solicitud de Hermanos que dirige al P.Champagnat; la primera había sido hecha en octubre de 1836. Los Hermanos actuarían en el servicio y organización de los grupos de peregrinos, en constante flujo. Aunque no fuese la finalidad de los Hermanos, la frase que el Fundador empleó en la respuesta: ?sería un trabajo interesante?, dejó al P.Rigaud con la esperanza de recibir Hermanos y, por eso, continuó en la preparación de la casa para la futura comunidad. La respuesta del Fundador puede ser leída en Carta 103. (Cfr. H.Ivo Strobino, nota introductoria al texto, ?Cartas Passivas?)
La Louvesc, a 10 de marzo de 1837.
Reverendo Padre:
La paz de Nuestro Señor. Permítame que le recuerde la petición que tuve el honor de hacerle en el mes de octubre último de dos de sus estimados Hermanos para nuestra parroquia de la Louvesc y que Ud. tuvo la bondad de no rehusar en principio. Ud. me había prometido hacer una corta visita a nuestro buen santo Regis, pero la multitud de sus ocupaciones le ha impedido sin duda realizarla; y también es cierto que la estación no ha sido nada favorable para permitir visitas por estos lugares. Si la misma causa no vuelve a ser obstáculo, cuente, Rdo. Padre, con nuestra solicitud en recibirlo.
La casa construída para los queridos Hermanos no está todavía utilizable. Se le techó bastante antes del invierno, pero las dependencias interiores no están todavía hechas. Se va a poner manos a la obra después de Pascua. Pero esto no ha de ser impedimento para que Ud. nos envíe a los Hermanos tan pronto como le sea posible. Será para nosotros un placer alojarlos en nuestra propia casa; y haremos todo lo que Ud. nos indique. Estos buenos Hermanos podrán prestarnos importantes servicios en nuestra Iglesia durante el tiempo de las romerías y peregrinaciones.
Aprovecho esta ocasión, Rdo. Padre, para encomendar a sus oraciones y a las de su fervorosa comunidad la Misión que comenzaremos aquí el próximo domingo para la parroquia de La Louvesc y que durará tres semanas. Si bien nuestra buena gente oye con bastante frecuencia predicar, les parece sin embargo que es menos para ellos que para los peregrinos que vienen durante la buena estación. Contamos mucho con su caridad y con la de sus buenos y queridos Hermanos.
Acepte, Rdo. Padre, la expresión de mis afectuosos y respetuosos sentimientos con los cuales soy, en los Corazones de Jesús y de María, su humilde y seguro servidor,
P. RIGAUD, sj, Sup.
Edición: CEPAM
fonte: AFM 129.29