20 de septiembre de 2017 COLOMBIA

Martes, 19 de septiembre

El capítulo dedicó su 12º día a los laicos y al informe de la situación económica. Por la mañana, los 8 laicos invitados dirigieron las dos sesiones. Por la tarde, el H. Libardo Garzón presentó la realidad económica del Instituto. No fueron momentos de decisiones ni de aprobación de documentos, sino la continuación de la toma de conciencia del Instituto como cuerpo.

 

Comenzando con la oración

En la oración de la mañana se propuso un ejercicio de Tai Chi y luego el H. Tony León dirigió la meditación con un vídeo que subrayaba el hecho de que el Instituto es un cuerpo. Este momento continuó preparando al grupo para descubrir la identidad del Instituto.


Continuando el descubrimiento del cuerpo

Noemí Pinto comenzó la animación invitando a los capitulares a descubrir el propio cuerpo y la presencia del otro a través de abrazos, miradas, saludos, círculos . Un ejercicio fácil para algunos, pero desafiante para otros.

A continuación, Tony Clarke introdujo el trabajo de la mañana. En pequeños grupos compuestos de 3 personas, como células de un cuerpo, los participantes del Capítulo compartieron la experiencia vivida en la relación entre hermanos y laicos: en comunidad, en la misión, en la espiritualidad. Se les pide reflejar cómo dichas experiencias ayudaron, a laicos y hermanos, a vivir la vida marista. Se destacó también los elementos de novedad descubiertos en las experiencias y lo que impidió el éxito de la vida compartida.

 

Compartiendo la reflexión

Destacamos algunas contribuciones de lo compartido en público sobre la reflexión de los grupos:

  • La comunión con los laicos es una luz para la experiencia como Hermanos.
  • La vida religiosa se caracteriza por la fraternidad, la espiritualidad y la misión. La puerta de entrada de los laicos en la vida marista es la misión; y, a partir de ahí, la relación se extiende a la espiritualidad y la vida comunitaria.
  • La vocación cristiana es el punto de partida. Nace luego la invitación a la vida marista.
  • Muchas veces los laicos se convierten en modelos para los hermanos, principalmente enseñando cómo ser iglesia.
  •  El carisma y la misión maristas no son propiedad de los hermanos.
  • La experiencia de vida juntos es un desafío.
  • Para algunos hermanos la cuestión laical es esencial, para otros no tiene importancia. En algunos lugares existe un trabajo firme, en otros se están dando los primeros pasos.
  •  La mesa de la misión une a hermanos y laicos, especialmente en las áreas esenciales de la persona, como la educación. De ahí nace la comunión y la búsqueda de modos más profundos de compartir el carisma común, ser marista.
  •  Las diversas dimensiones de la persona y de la institución tienen que caminar juntas. Si las Unidades Administrativas no lo tienen en cuenta, la experiencia común no se materializará.
  • ¿Quiénes son los laicos maristas? ¿Se caracterizan por un proceso, por un compromiso o son todos los que tienen contacto con los maristas?
  •  La palabra clave es comunión. Siempre se inicia por el compartir y luego las historias crecen, la vocación se desarrolla, caracterizándose como proceso vocacional que enriquece también la vocación del Hermano.
  • Las estructuras deben nacer a partir de las experiencias vividas y no antes de ellas.
  • En una comunión verdadera, el compartir no ocurre sólo a nivel de la misión, sino que permea la vida como un todo. Y puede suceder que la puerta de entrada en el proceso vocacional no sea necesariamente la misión.
  • Tres palabras clave en la relación son identidad, seguimiento y diálogo.
  • Los Hermanos jóvenes crecen naturalmente con la comunión con los laicos; los de más edad tienen dificultades para acoger este aspecto de la vida marista.
  • Los grupos de voluntarios han dado una energía fraterna a las comunidades de Asia, donde normalmente las comunidades están formadas por dos hermanos.
  • La complejidad y particularidad de la presencia en los 5 continentes hace que cada contexto tenga una itinerario propio.
  • La emergencia del laicado es como una transfusiónde sangre que llena de energía el cuerpo que parecía debilitado. Una vez hecha la transfusión, la sangre nueva no se distingue de la anterior y llega a todas las células del organismo, produciendo vida. Si se impide que la sangre circule en alguna parte del cuerpo, el resultado es la gangrena.

Lo que nos está diciendo el cuerpo

Pep Buetas recordó los pasos dados por el Instituto en relación al tema de la vocación laical, principalmente en la línea de la formación y, actualmente ,en el proceso vocacional. El tiempo nos enseñará cuál es la propuesta adecuada.

Aprovechando la imagen del cuerpo, los demás laicos invitados motivaron momentos de reflexión basados ​​en cuatro emociones: miedo, tristeza, ira y alegría. El funcionamiento del cuerpo se basa en las emociones: el cerebro detecta si lo que estamos viviendo es una amenaza o una ayuda para la supervivencia. Si es amenaza, provoca miedo y otras reacciones. En cambio, si es una ayuda, no hay rechazo de la experiencia vivida. Por eso es importante tener conciencias de las emociones, darles nombre, saber lo que está sucediendo.

Todo el grupo se reunió en un rincón de la sala capitular y para cada emoción se movía a otro espacio. Se ha expresado qué situaciones provocan miedo, cuáles tristeza, ira y alegría en la relación entre hermanos y laicos.


Sesión de la tarde

La tercera sesión del día, de las 15 a las 17,15, comenzó con una oración, que recordó a la población de México, afectada por otro terremoto, y también a la Sociedad de María, los Padres Maristas, que realizan su Capítulo del 20 de septiembre 11 de octubre.


Dimensión financiera del cuerpo

Libardo GarzónEl hermano Libardo Garzón, Ecónomo General e invitado al Capítulo, ayudó a la Asamblea a tomar conciencia del aspecto económico del cuerpo que es el Instituto. A diferencia de otros capítulos, el tiempo se utilizó para presentar la situación financiera del Instituto y no la de la Casa General.

Hasta hace poco, no había la posibilidad de recoger datos de todo el Instituto. Hoy, gracias a la aplicación “DOMUS”, desarrollada por un equipo de la Provincia Brasil Centro-Sur, se puede tener una visión general de la economía del Instituto.

Después de presentar varios gráficos con detalles técnicos, el H. Libardo concluyó subrayando algunos aspectos:

  • El instituto tiene un capital financiero fuerte.
  • La mayoría de los ingresos viene de lo que se sabe hacer mejor: educación primaria.
  • El 6% del capital es invertido en solidaridad.
  • Está bajando el margen de rentabilidad.
  • Hay provincias que necesitan apoyo profesional.
  • La congregación debe considerar la sostenibilidad del Instituto a largo plazo.

 

Necesidad de cambiar mentalidad

Se detecta la falta de una perspectiva estratégica, con prioridades comunes. Cada Unidad Administrativa camina conforme a sus convicciones. Es necesario un cambio de mentalidad que tenga en cuenta cuatro aspectos:

  • Gestión ética
  • Gestión competente
  • Solidaridad
  • Perspectiva de Cuerpo global.

Es necesario preguntarse qué modelo económico quiere seguir el Instituto: franquicia, federación, cuerpo global…

Hubo, luego, espacio para compartir impresiones y comentarios sobre a la administración de los bienes en el Instituto.

 

Preocupación por México y actividad en las fraternidades

La sesión concluyó con la lectura de un mensaje del H. Javier Salcedo, Viceprovincial de México Central, donde comunica que las obras maristas de la Provincia están bien y nadie resultó herido con el terremoto de hoy.

La última actividad del día, de las 18:30 a las 19:30, fue el compartir de vida en las fraternidades.

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