4 de agosto de 2020 CASA GENERAL

Objetivos de desarrollo sostenible: “Ciudades y comunidades sostenibles”

Corría septiembre de 2015 cuando los líderes de muchos Estados decidieron adoptar una serie de objetivos para mejorar nuestro mundo, con la mirada puesta en el año 2030. Estos objetivos nos hablan de la urgencia de nuestro mundo para poner fin a la pobreza, mientras se cuida el planeta y se lucha por la mejora de las condiciones de vida de todos los habitantes del mundo. Pobreza, ecología y desarrollo se dan la mano en estos objetivos.

Curiosamente, ese mismo año, unos meses antes, el papa Francisco nos regalaba a los cristianos, y a toda la humanidad, la encíclica Laudato Si. El papa Francisco se adelantaba de esta manera a los líderes políticos mundiales, con una reflexión sobre la pobreza, la ecología y el desarrollo humano.

El Papa nos recuerda que la erradicación de la pobreza, el cuidado de la casa común y el desarrollo de todas las personas son conceptos inseparables. Nos recuerda que suponen un compromiso institucional y, también, personal. Implican un compromiso de la Iglesia, de las sociedades y del mundo. Ni como personas individuales, ni como Maristas de Champagnat, podemos desatender la urgencia que promueven tanto la encíclica del Papa como los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

El XXII Capítulo General, celebrado a finales de 2017, se hace eco de esta urgencia, y la asume dentro del Mensaje a todos los Maristas como un reto para los próximos años. “Abandonar la cultura de los egos”, “promover los ecos”, “despertar a nuestro alrededor una conciencia ecológica”, “el cuidado de nuestra casa común” … son expresiones que ya forman parte de nuestro sentir como maristas.

Hemos empezado a desarrollar algunas iniciativas en distintas partes del Instituto y estamos emplazados a seguir creciendo en estas llamadas para crear Ciudades y Comunidades sostenibles, en lo ecológico y también en lo humano; sostenibles en el desarrollo y, también, en la eliminación de la pobreza.

Si el reto de crear sociedades sostenibles es urgente, se convierte aún más urgente en los grandes núcleos urbanos, donde desaparece la naturaleza, donde hay mayor contaminación, donde existen importantes barrios marginales. Trabajar por ciudades más sostenibles empieza por dar pequeños pasos a nivel de pequeñas comunidades, también en las nuestras como Maristas de Champagnat. Desde esta transformación de lo pequeño, de nuestro propio ambiente, podremos luchar y lograr la transformación de las ciudades. Viviendas dignas, acceso a servicios básicos, inversión en medios de transporte públicos, cuidado de espacios verdes… implican este cambio hacia la sostenibilidad.

¿A qué me comprometo como Marista, hermano o laico, para crear comunidades y ciudades más sostenibles? Como Institución Marista, ¿podemos hacer algo para ayudar en el cuidado de nuestra casa común? Ciertamente la respuesta es sí. Es tiempo de empezar, es tiempo de dar pequeños pasos, es tiempo de unirnos a otros en este empeño.

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H. Ángel Diego – Director del Secretariado de Solidaridad

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