10 de octubre de 2012 HAITí

Presencia en Haití

A continuación la entrevista realizada al H. Antonio Cavazos, publicada en la página de su Provincia de México Occidental.

¿Cuándo llegó a Haití hermano?

Llegué a Haití el 7 de septiembre de 2008. En los días anteriores había pasado un huracán por Puerto Príncipe, la ciudad sufría en ese momento las consecuencias, mucha gente en la calle retiraba árboles caídos, escombro de bardas derrumbadas, cables de luz tirados. El caos vial. Me recibió con gran amabilidad en el aeropuerto el Hno. Frisnel Walter y me llevó a Villa Manresa, luego de un buen descanso y de conocer algo de la ciudad, nos fuimos en avión a Jérémie, donde está la casa Postulantado. Allí me saludó mi superior de comunidad el Hno. Lucien Renaud que me trasladó a Dame Marie donde prestaría mis servicios como profesor de español en la secundaria marista Nativité. Quedé fascinado al contemplar la hermosura del paisaje y el verdor y exuberancia del campo de este País y la transparencia del mar.

¿Qué fue lo que más le impactó a su llegada a Haití?
La pobreza con que vive la gente. Su alegría y al mismo tiempo su queja de falta de recursos. Su fe en Dios y su amor a la Sma. Virgen. El atraso en el desarrollo social por muchos años de abandono y desorganización y carencia de planeación: País lleno de jóvenes, sin suficientes universidades. País lleno de gente pobre, faltan hospitales, transporte digno (caminan muchos kilómetros a pie), faltan caminos en buen estado, falta higiene hay basura por todas partes, faltan los servicios públicos, falta de trabajo, falta…. (hay mucho por hacer, más bien dicho, todo por hacer). Falta alguien que ame Haití y promueva eficazmente su desarrollo. Falta Iglesia (Hoy sin profetismo, amordazada en un tiempo, vive cómodamente ya sin mordaza).

¿En qué consiste la actividad que realiza en Haití?
Educador al estilo Marcelino Champagnat. Atención especial a los maestros, a algunos los siento como sin fuerzas ante su misión, o sin creer en ella. Doy atención especial a los alumnos más difíciles, muchos de ellos sin esperanza, pero con deseos de vivir y deseando un cambio.

¿Qué es lo que más le duele de Haití?
Las Escuelas no educan en los valores, ofrecen algo de instrucción. Los jóvenes preocupados sólo en pasar sus exámenes sin horizonte claro de futuro. Los niños con hambre. La gente pobre que camina al mercado cargando sobre su cabeza pesos exagerados, buscando con angustia vender y dinero para sus familias. La falta de higiene, la basura por todos lados, País bello y gente sucia, sin recursos y sin educación. Abandonada como ovejas sin pastor. Los hermosos bosques tropicales que se van agotando por la explotación. Y mezclado a este dolor, la alegría y esperanza del pueblo. La juventud y la niñez, con sus juegos y barullos, alegra todo rincón.

¿Qué cosas alimentan su esperanza?
La eficacia de la Educación que da una Escuela Marista auténtica. Es esta educación, en mi forma de ver las cosas, la única manera que posibilite el cambio de situación de esta gente.

¿Cuál es la situación de los niños y jóvenes de Haití?
Son jóvenes y niños(as) muy inteligentes, despiertos, abiertos, alegres. Todos tienen la posibilidad de estudios de primaria. Comienzan las dificultades cuando ingresan a la Secundaria-Prepa. El Ministerio de Educación escoge (mediante examen) los que pueden seguir estudios profesionales en una universidad, hay pocas universidades y los demás han de buscar otro camino. La mayoría de los jóvenes y niños que yo conozco tienen anemia. Comen una vez al día con su familia, han de buscar en el campo o con sus vecinos algo de comer si sienten hambre fuera de la comida familiar. En la zona donde trabajo, los alumnos no cuentan con electricidad para hacer sus trabajos escolares, estudian a la luz de las velas o aparatos de kerosene. No hay servicios de agua potable, hay que irla a buscar a las fuentes, a veces lejos. Algunos alumnos caminan dos horas para llegar de sus casas a la escuela, luego hacen otro tanto de regreso a sus hogares, aquí les damos algo de comer según nuestras posibilidades, si no tenemos, los alumnos caminan de regreso a sus casas con su estómago vacío. Esto me causa dolor.

¿Qué retos educativos enfrentan los colegios que atienden los hermanos?
Que los maestros sigan la Pedagogía Marista, que se entusiasmen de su misión y sepan que lo que están haciendo es el mejor servicio que pueden hacer a su País.

¿Qué otros proyectos atienden los hermanos maristas en Haití?
Somos ahora un grupo muy reducido de hermanos. Es cierto que tenemos algunos laicos muy comprometidos con la causa marista. Nuestro proyecto es atender bien las obras que ahora tenemos: Una primaria en Dame-Marie con 400 alumnos. Una secundaria-preparatoria en Dame-Marie con 350 alumnos. Una secundaria-preparatoria en Latibolière con 500 alumnos y una pequeña primaria de dos grados en Latibolière, para niños en situación difícil o huérfanos. Tenemos como proyecto atender bien nuestro Postulantado y abrir el noviciado aquí mismo en Haití.  Tenemos hermanos maristas haitianos en las casas de formación, los esperamos a ellos para juntos hacer nuevos proyectos en beneficio del País.

¿Qué le ha enseñado esta experiencia para su vida como hermano marista?
Que la presencia Marista es necesaria, urgente, indispensable. Sin querer ser pretencioso puedo decir que la presencia marista aquí es la respuesta de la Virgen a las oraciones de este su pueblo que le pide diariamente su ayuda en sus necesidades.

____________________
http://www.maristas.org.mx/portal/

VOLVER

Programa para el desarrollo de las capacidade...

SIGUIENTE

Vida marista en Mindelheim...