UBUNTU y el diálogo fraterno
Hoy (28 diciembre), día de los Santos Inocentes, continúa el encuentro de Consejos de África con el Consejo general. Ha sido un día para profundizar algunos aspectos más relevantes que deberían acentuar el perfil profético de la vida marista en África.
Hemos iniciado la mañana haciéndonos eco de lo que durante la noche ha resonado en nuestra mente y en nuestros corazones después del trabajo e intercambio de ayer. De nuevo, se ha subrayado la importancia de focalizar nuestra vida y misión en Cristo y su evangelio, vivido al estilo de María.
Arrancando de este punto, la presentación del H. Emili, Superior general, ha remarcado el lugar insustituible que debe ocupar el compromiso por desarrollar una vida espiritual y una experiencia de oración capaz de sostener y vitalizar nuestra vida. Junto a este desafío, el H. Emili ha desarrollado las consecuencias de vivir la evangelización en clave de reconciliación en el seno de las sociedades africanas.
Inspirados por la propuesta del XXI Capítulo general que nos invitó a desarrollar un diálogo caracterizado por la “fraternidad”, se ha presentado un decálogo de puntos a tener en cuenta para ir construyendo un verdadero “diálogo fraterno” en el seno de nuestras provincias y también de los mismos Consejos, convencidos de que lo que hagamos o dejemos de hacer afecta al conjunto del sistema, desde los niveles más inmediatos hasta alcanzar escala universal. El concepto africano “ubuntu” nos ha ayudado a adquirir esta conciencia sobre la trascendencia a todo nivel de lo que somos capaces de vivir y encarnar. El obispo Desmond Tutu explica: “Una de las expresiones en nuestro país es “Ubuntu”, la esencia del ser humano. ‘Ubuntu’ se refiere particularmente al hecho que uno no puede existir aisladamente como ser humano. Alude a la interconexión. No se puede ser humano por sí mismo, y cuando se tiene esta cualidad –Ubuntu- uno es conocido por su generosidad. Nos imaginamos a nosotros mismos frecuentemente como individuos, separados unos de otros, cuando, en realidad, estamos conectados e influimos en el mundo entero. Cuando uno realiza el bien, éste se contagia, es para toda la humanidad.”
La jornada ha ofrecido tiempos de reflexión personal e intercambio a nivel de cada Consejo. Se concluyó el día con una visita conjunta al MIC (Centro Internacional Marista donde se están formando 102 jóvenes hermanos de África y Madagascar).
Nairobi, 28/12/2011.
Crónica del primer día