2015-10-14

Clausura de los 90 años del Colegio Maristas en Maracaibo

¡Adiós a los 90!

 El 20 de mayo de 2014 con la  Eucaristía en la Basílica de la Virgen de Chiquinquirá presidida por el señor arzobispo de Maracaibo, Monseñor Osvaldo Santana,  se iniciaba oficialmente la celebración de los 90 años de la fundación del Colegio marista Ntra. Sra. Chiquinquirá en Maracaibo.

A lo largo del curso 2014-2015 fueron varios los actos o festejos celebrativos de esa efeméride: caminata familiar del paseo del Lago a la sede del Colegio, rally automovilístico, segunda gala cultural marista en Maracaibo, exposición “90 años de identidad marista” abierta todo público por dos meses, mayo y junio, en el Centro de arte y cultura Lía Bermúdez de Maracaibo.

Cinco de octubre de 1925, lunes, con treinta y tres alumnos en la “tierra del sol amada”, Maracaibo, abría sus puertas el primer colegio católico para varones: el Colegio Ntra. Señora de Chiquinquirá. Día de gozo, de alegría y de felicidad para toda la ciudad. Pero muy especialmente día de acción de gracias: el sueño de muchos marabinos y en especial de Monseñor Marcos Sergio Godoy, quien veía cumplido su  sueño: un colegio católico para varones en la capital zuliana

Cinco de octubre 2015, lunes igualmente, también con una celebración eucarística, el Colegio Chiquinquirá, ha celebrado  la clausura del año jubilar de los 90 años de la obra marista en Maracaibo, con idénticos sentimiento: gozo, alegría, felicidad. Pero muy especialmente día de acción de gracias, de deseos de continuar creciendo, de compromiso de fidelidad al sueño de San Marcelino: Maristas por siempre en Maracaibo..

La celebración eucarística se vivió en el templo parroquial, Ntra. Sra. De Consolación, sólo  a calle por medio del Colegio marista. A las 7,00 am que inicia la celebración el bello templo gótico lucía lleno hasta “la bandera”. La misa celebrada por el Señor Párroco del templo de la Consolación.

Momento especialmente cargado de significativo simbolismo de gratitud y compromiso en la celebración fue el del Ofertorio: De los alumnos mayores de Quinto año a los pitoquitos de Primer grado, desfilaron hacia el altar mientras el locutor animador los iba presentando: Quintos años, promoción 75 (graduación) 2016; … Cuartos años de Secundaria, promoción 76;… Sextos grados de Primaria, promoción  80;… hasta llegar a los chipilines de Primer grado, promoción 85. Se graduarán de bachilleres en 2025, año centenario del  Colegio: gozo, alegría, felicidad y COMPROMISO  de todos.

Terminada la santa misa en multicolor y larga procesión toda la muchachada en uniforme deportivo, y los docentes, personal de apoyo, padres, exalumnos,  cruzaron la calle y por “la puerta grande” pasaron al patio interior del Colegio donde siguió el regocijo, la alegría, la fiesta.

Los alumnos alineados en los corredores del Colegio, los ojos fijos en las 24 tortas de cumpleaños, una por cada sección, que  estaban colocadas sobre mesones, en el centro del patio.  Pero antes de saborear y compartir una de aquellas tortas  que sus ojos contemplaban, a todo pulmón cantaban las gloriosas notas el himno nacional de Venezuela y  del Himno de las Juventudes Maristas.

Al punto exacto una retreta con trombón, platillos, tambores, trompetas, guitarra sorprendió a todos y se arrancó con el “cumpleaños feliz”, con resonancia en la caja torácica de pequeños y grandes, entre  los sonoros aplausos   de todos los presentes. Al soplo de una buena representación de alumnos se apagaron las velitas de los 90.  Cada una de las 24 tortas fue a parar a cada una de las 24 secciones del Colegio.

Los cerca de 40 grados que caldeaban el ambiente en la “Tierra del Sol amada” no fue óbice para que la chiquillería disfrutara de los “toboganes”,” hinchables” y mil otros juegos  y objetos de sana diversión.

Un Conjunto Gaitero,  obsequio del Banco Central de Maracaibo deleitó  interpretando en el Gimnasio del Colegio, un variadísimo repertorio  de gaitas y  puso a bailar siguiendo los ritmos y compases gaiteros  por casi dos horas, a niños, jóvenes y no tan jóvenes  y  “cargaditos” de años algunos. La  temperatura no amainó, pero el baile terminó cuando los músicos se fueron “con la música a otra parte”.

De principio a fin de esta bellísima jornada, del “maracucho”, en ella presente, se escuchaba hablar ya de la celebración de los 100. Será  con la promoción de bachilleres n° 85, año 2025, la de los chipilines de hoy.

Con ilusión, optimismo, esfuerzo y constancia, eso y mucho más es posible.

H. Isaac Revilla – 6 de octubre, de 2015

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