2014-08-01

Visita del H. Emili a El Salvador – crónica del 31 de julio

Fotos en FaceBook

Como cada día, iniciamos la jornada con la Eucaristía y la oración de la mañana en el Liceo Salvadoreño.

Visita a la Escuela San Alfonso y al CEC Marista

En la mañana, esperaban al Superior general los miembros de la comunidad educativa de la Escuela San Alfonso. Recibido por el H. Jorge y Fidel, así como otros miembros de la comunidad, se dio un recorrido rápido por las instalaciones de las oficinas y por la nueva área en construcción del edificio del futuro bachillerato.

En los pasillos de la escuela, estaban esperando en dos hileras todos los estudiantes. El recorrido permitió que todos ellos pudieran estar cerca del Superior general y muchos, estrechar su mano. Con globos y otras manualidades, saludaron al Hno. Emili. Los rostros de felicidad y alegría por el encuentro se mostraron en todo el recorrido por la Escuela. Luego, se pasó a un salón, con el grupo de promoción de Octavo, para vivir un sencillo y emotivo acto. El presidente de los estudiantes dirigió unas bonitas, humanas y densas palabras al Hermano Superior. El Hno. Emili agradeció a todos la gran alegría mostrada en sus rostros y la hermosa acogida prodigada. Invitó a todos a sentirse parte la gran familia marista, presente en 80 países y con más de 600,000 destinatarios. Recordando el privilegio de tener una educación, les invitó a dar lo mejor de sí mismos para el bien del pueblo salvadoreño y para la creación de una sociedad mejor. Se concluyó el momento con la entrega de un obsequio.

Luego, se tuvo un encuentro breve con todo el personal docente, administrativo, directivo, pastoral y de mantenimiento de la ESA. El Hno. Jorge agradeció la presencia del Hno. Emili y presentó a los diferentes miembros. Recordó la herencia de 81 años de historia de la escuela San Alfonso y reconoció en todos los presentes, Hermanos y Laicos, su profundo sentido marista. Explicó la proyección y sentido de la ESA así como de la escuela vespertina, el CEC Marista.

El Hno. Emili acogió las palabras y deseos expresados y resaltó el gran amor por la educación marista, el gran amor por los ideales maristas y el aporte que dan al mundo y a la sociedad salvadoreña. Invitó a sentirse parte de una gran familia marista, que está en situaciones muy diversas alrededor del mundo, y que posee un denominador común: ser sembradora de esperanza. Esta vocación lleva a los maristas a realizar sus proyectos en lugares muy difíciles y manifestar una enorme vocación. Manifestó finalmente su alegría por el crecimiento de la Escuela.

El director, Fidel, agradeció su presencia y el ánimo que infunde en todos al dedicar parte de su tiempo a estar en esta escuela.

De manera similar, los estudiantes de la tarde pudieron disfrutar de la presencia del Hno. Emili. A ambos lados de los pasillos, prácticamente todos los estudiantes y profesores recibieron un saludo personal el Hermano Superior general. Su alegría resultó contagiosa e impresionante. Este centro, fundado en el 2001, ejerce una excelente proyección social. Después del recorrido, el calor humano de la capilla superaba el intenso calor de las primeras horas de la tarde. Luego del canto de bienvenida y la oración, el Hno. Jorge Muñoz saludó a todos los presentes y ofreció unas palabras de bienvenida. El Hno. Emili se dirigió a todos reconociendo los percibido en el centro. Acercándose a un estudiante, con discapacidad, Mauricio, le preguntó que hacía esta escuela de especial. Respondió que la escuela “ayuda a todos los estudiantes”. El Superior general les animó a todos a seguir adelante y apreciar las posibilidades que les ofrece la educación.

Los estudiantes habían preparado un hermoso baile, que fue interpretado por 6 de ellos. Luego, el director, Fidel Miranda, entregó un CD con la memoria visual de las vida del CEC Marista. Se finalizó el momento, reuniendo al personal en la casa de los hermanos para compartir un refrigerio y tomarse fotos.

Gracias a los Hermanos Jorge M, Carlos M, Pepe A., Néstro M, a Fidel y a todo el personal y estudiantes de la ESA y del CECMarista, por el calor de una acogida muy marista.

src=https://fbcdn-sphotos-d-a.akamaihd.net/hphotos-ak-xpf1/v/t1.0-9/10523203_705690962800798_6376559433632688792_n.jpg?oh=e5debefe08d8b99e14abcccc39cc5114&oe=5440FB3C&__gda__=1413449814_7db36783efeff4535a1a2b9bf60e08da

Participación en la Escuela de Líderes III

El Hno. Emili dedicó el resto de la manana a iluminar con su reflexión a los participantes de la Escuela de Líderes III. El grupo oscila los 100 jóvenes y han estado viviendo esta experiencia por los últimos días. Después de la presentación del Hno. Emili, él se encargo de orientar la reflexión. A continuación la síntesis de la misma, elaborada por el Hno. Omar Peña:

El Hno. Emili introdujo el tema sobre la espiritualidad en el mundo juvenil, tomando como punto de partida que la espiritualidad está en profunda conexión con la vida y la realidad personal-vital. De ahí, que un problema importante, es que vivamos distraídos, preocupados o estresados por aquello que no ha ocurrido. “La vida es eso que pasa mientras miras el celular”, ha aseverado aludiendo a la facilidad con que podemos perdernos en la mera de la tecnología. Refiriéndose a varios pensadores y autores sobre espiritualidad, expuso que el apresuramiento y superficialidad son las enfermedades psíquicas del siglo XX/XXI. Vivir en la superficialidad, en el apresuramiento y la distracción nos llevan a tener una vida que no es la nuestra, en la superficie, sin jamás tomar conciencia de quién realmente somos y la vida se nos va sin vivirla.

Inmersos en esta situación, se constata que la gente quiere y aspira a algo más. Esto no es más que un reflejo claro de la sed de espiritualidad de los hombres y mujeres de hoy, como nosotros. Lo triste es que ante esta necesidad lo que con frecuencia hacemos es todo lo contrario, llenarnos de ruido y no acertar a la hora de patrocinarnos estos momentos de silencio que nos ayuden a conectar con nuestra esencia y esa sed profunda de ser nosotros mismos.

Ahondando en su exposición se refirió al término “Shekiná” que en la tradición bíblica nos recuerda que Dios es Presencia. Por lo tanto, si Dios es presencia, no debe ser tan difícil encontrarse con Dios, significa que él ahora mismo está acá, y no hay que hacer nada para encontrarnos con él. Los que estamos ausentes somos nosotros, necesitamos abrir los ojos, despertar. Necesitamos acallarnos para encontrar el presente. Es fundamental experimentar que Dios es presencia-presente.

Finalizó su intervención recordando que la oración contemplativa nos lleva a descubrir el yo más auténtico de nosotros mismos, al silencio. En nuestra misión como animadores de pastoral estamos llamados a propiciar esta oración, este espacio espiritual y de actitud contemplativa que eduque esta atención plena de la que hablamos.

Gracias al Hno. Jorge Sánchez, los hermanos participantes y los jóvenes de REMAR por apreciar el mensaje del Hno. Emili y por acogerlo con juvenil sentido fraterno.

Encuentro con las Comunidades Remar

Finalizamos la jornada con un significativo encuentro con las comunidades REMAR. Estuvieron representadas 12 comunidades. Dimos inicio a la actividad a las 7:00pm. El Delegado Nacional de PJ, Gustavo, presentó el momento, dio la bienvenida e introdujo la oración. Después dividió a los participantes en ocho grupos para discutir la pregunta: ¿Qué implica para ti, joven salvadoreño, ser un seguidor de Jesús al estilo de María? Los grupos dialogaron y luego expusieron sus conclusiones. El Hno. Emili, posterior a unas palabras introductorias, les recalcó a los jóvenes la importancia de conocer la realidad y no pasar superficialmente por la vida, la necesidad de ser agentes de cambio y no sucumbir a las tentaciones de caminos más fáciles. Les invitó a ser trigo en medio de la cizaña y, en esa convivencia, reafirmar que la debilidad del amor tiene infinitamente más potencia que la fuerza del mal. Para explicarlo, mencionó el ejemplo de Mons. Romero.
Les invitó a ser el rostro mariano en la Iglesia y a marcar la diferencia durante los tres años de preparación del Bicentenario, acentuado tres elementos: compomiso explícito, sentido comunitario y la interioridad, que abre la puerta a la mística. Les compartió además una clave adicional para estos tres años: Inclusión (año Montagne), Interacción (año Fourvière), Interioridad (año La Vallá).

Por último, los jóvenes pudieron hacerle varias preguntas al Hermano Emili y se tomaron fotos por Comunidades.

Con esto, agradecidos a María por este día hermoso, cerramos la jornada.

___________

H. Luis Carlos Gutiérrez Blanco – Provincial América Central
 Fotos en FaceBook

PREV

Visita del H. Emili Turú, superior general e...

NEXT

Visita del H. Emili a El Salvador - crónica ...