6 de agosto de 1969 – 6 de agosto de 2019
En la fiesta de la Transfiguración del Señor, el hermano Henri Vergès llegó justo ese día a Argelia para responder al llamado del Superior Provincial que le había pedido que se responsabilizara de la Escuela Saint Bonaventure en Argel. Esto fue hace 50 años, un 6 de agosto de 1969.
Conocemos la acción que llevó a cabo entre los jóvenes argelinos, durante 25 años.
El 8 de mayo de 1994, fue asesinado junto a la hermana Paul-Hélène en la biblioteca de la calle Ben Cheneb, en el distrito Casbah, en Argel.
Durante la celebración de sus funerales, en la fiesta de la Ascensión del Señor, el 12 de mayo, en la Basílica de Nuestra Señora de África, el Cardenal Duval, los presentó a un público numeroso – que contaba con muchos musulmanes- declarando: "El querido hermano Henry y la admirable hermana Paul- Hélène han sido testigos auténticos del amor de Cristo, de la actitud totalmente desinteresada de la Iglesia y de la fidelidad al pueblo argelino".
De la Transfiguración a la Ascensión: es la trayectoria que Dios ha querido para Henry, con su beatificación en Orán, el pasado 8 de diciembre, en el grupo de los 19 mártires de Argelia.
Que el recuerdo del hermano Henri Vergès sea un motivo de acción de gracia para la Familia Marista y un estímulo en la vida cotidiana. La oración de los 19 mártires de Argelia es una invitación a ser artífices de la paz, allí donde estamos.
Beatos mártires de Argelia
Señor Dios Nuestro, Padre misericordioso,
te damos gracias
por el don de las vidas de nuestros Hermanos y Hermanas
Beatos de la Iglesia de Argelia:
El obispo Pierre,
Henri y Paul-Hélène, Caridad y Esther,
Jean, Charles, Alain y Christian;
Angèle-Marie y Bibiane; Odette
Christian, Luc, Christophe, Michel, Paul, Bruno y Célestin.
A imagen de tu Hijo, ellos dieron sus vidas por sus hermanos y hermanas.
Tú los inspiraste para permanecer en fidelidad y amistad
con su Iglesia y con el pueblo de Argelia.
Reconocemos en el don de sus vidas,
la obra de tu gracia y de tu Espíritu Santo,
que los llevó a dar testimonio supremo.
Te invocamos Padre, para que, a través de la intercesión de estos Beatos,
la paz y la amistad prevalezcan sobre las fuerzas de la división y del odio.
Invocamos a estos testigos de tu Amor por… (mencionar la gracia que se desea recibir)
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Imprimatur, 8 de septiembre de 2018,
Mons. Desfarges, Arzobispo de Argel.