Día de la vida consagrada en la diócesis de Cienfuegos

El lunes tres de febrero, las religiosas y religiosos de la diócesis de Cienfuegos nos dimos cita en Abreus para celebrar el día DSC02186 cropde la Vida Consagrada. Nuestro encuentro reunió a la casi totalidad de las comunidades y estuvo centrado en el icono de Betania. 

 Iniciamos con una oración, enseguida la hermana Nicolasa Tobar nos motivó un momento de reflexión personal y de compartir en grupo, a partir del escrito del P. Benjamín González Buelta S.J.: "Betania, un signo de comunidad y de misión".


Nuestro encuentro alcanzó mayor hondura y altura con la celebración de la eucaristía, presidida por nuestro obispo Mons. Domingo Oropesa. Un compartir fraterno en torno a la mesa marcó el final de nuestra jornada. Aprovechamos la visita a Abreus para conocer la recién remodelada casa de nuestras Hermanas Franciscanas Misioneras de María, nuestras amables anfitrionas. Además afinamos los detalles para el curso que como CONCUR queremos ofrecer a nuestras comunidades parroquiales sobre historia de la Iglesia en Cuba, que será impartido por el P. Ramón Rivas S.J.


El encuentro nos brindó la oportunidad no sólo de celebrar y agradecer nuestra común vocación al seguimiento del Señor, también nos dejó una serie de desafíos: hacer de nuestras comunidades espacios de contemplación y de servicio, de apertura al que llega de fuera y de amistad, de compromiso con las periferias existenciales y de resurrección.



 En nuestro interior siguen resonando las notas con las que iniciamos nuestra jornada: "Betania es la casa en donde la vida / por fin resucita y vuelve a surgir / un grito que invita a salir hacia fuera / es amor que libera y convoca a vivir".