8 de setembro de 2015

Postulantado Montagne, Loja

Amigos, hermanos y laicos, desde nuestra casa del Postulantado les damos un cordial saludo. Terminando el mes de agosto queremos compartir con ustedes algunas alegrías que animan nuestra vida.

El camino formativo como Provincia va dando pasos concretos. El tener una casa en común para nuestros postulantes de Colombia, Venezuela Y Ecuador es ya una realidad. Contamos con dos jóvenes y tenemos la esperanza que desde el mes de enero del próximo año nuestra casa crezca en número. En ese sentido a principios del mes de septiembre, junto al equipo de formación inicial, evaluaremos el trabajo realizado hasta el momento y se concretará los posibles postulantes para el año 2016. Seguimos agradeciendo sus oraciones y el trabajo vocacional en cada uno de los países. De igual manera les seguimos animando a continuar con fuerza esta bella tarea.

Para compartir algo de estos meses, les decimos que desde que llegamos a Loja, hemos sido muy bien recibidos por lo jóvenes del hogar Champagnat, el Albergue Villarroel, otras obras y laicado marista de la ciudad. De ello, agradecemos en especial el poder compartir la misma mesa con los jóvenes del hogar, con quienes además de aprender a cocinar algunos platos de esta bella ciudad, compartimos vida, les apoyamos en sus procesos. El más significativo y reciente, el grado de bachiller de David Burí, que a sus 17 años culmina sus estudios secundarios. Vivimos muy agradecidos por esta oportunidad de seguir construyendo el sueño de Champagnat.

Nuestra Buena Madre también nos ha bendecido con nuevas presencias en casa. Hoy nuestro postulantado se enriquece con el apoyo del padre Walter Eraz, quien cada domingo, en una pequeña capilla de nuestra casa, celebra la eucaristía para la comunidad en general. Una oportunidad para crear lazos. Contamos también con once jóvenes del Colegio Bernardo Valdivieso, quienes llamados por el Espíritu Santo quieren vivir su vocación cristiana como maristas. En este momento son los pioneros en el trabajo con niños y jóvenes de nuestro barrio. Una oportunidad para que conozcan nuestra familia marista. Nuestra casa que en un principio nos parecía “grandísima” nos ha quedado pequeña para la acogida de tantas personas que comparten con nosotros.

Confiados en María, nosotros los hermanos, Julián y Carlos Andrés; los postulantes Alexnnys y Fernando; nuestros apreciados voluntarios, Jessica, Estefanía, Joel y Fernando (algunos ya han terminado su periodo de voluntariado pero igual los seguimos considerando como parte de nuestra familia); los tutores, Gustavo y Eduardo; nuestra fraterna Mónica Cabrera, directora del Albergue, les agradecemos nos recuerden en sus oraciones. Hacemos un gran equipo, queremos llevar en alto nuestro servicio a los Montagne de hoy.

“Todos nosotros, maristas de Champagnat, nos confiamos a nuestra buena Madre de Fourvière, peregrina de la fe, para que, con audacia y generosidad, seamos signos de su ternura y misericordia entre los Montagne de hoy, y fieles a nuestra misión de dar a conocer a Jesucristo y hacerlo amar”.

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