Comunidades nuevas para tiempos nuevos
La Provincia de América Central ha tenido un tiempo especial de gracia, de encuentro, de cambio, de mirar juntos el futuro. La VIII Asamblea Provincial, en Guatemala, del 9 al 11 de septiembre, reunió al 70 % de los hermanos de la provincia (68 hermanos presentes) y una representación de laicos y laicas (12 laicos/as) para simplemente reflexionar, compartir, comprometerse y tomar conciencia de todo lo que se puede hacer juntos para la construcción de “NUEVAS COMUNIDADES PARA UN NUEVO COMIENZO”.
La metodología escogida por la comisión preparatoria estuvo inspirada en el Modelo o Proceso “U”. Un proceso de 5 pasos de los cuales se han trabajado 4:
- Co-Iniciar, o sea crear una intención común basado en la escucha de los otros y la escucha de lo que la vida comunitaria nos está pidiendo que hagamos.
- Co-Sentir/Percibir, mirar, observar con la mente y el corazón totalmente abiertos.
- Presenciar: conectarse con el origen, la inspiración y la voluntad. Tomar conciencia y actuar desde esa nueva conciencia. Conversión del corazón y dejar que emerja lo que el corazón convertido me pide hacer
- Co-Creando: crear juntos lo que hemos comenzado a comprender y ver mejor. Buscando pistas de acción concretas que puedan ensayarse aún sin tener certeza de éxito.
El itinerario presentado junto a las ricas experiencias de oración y celebración, de reflexión personal y de compartir en sencillez y sinceridad hicieron de esta Asamblea algo especial, novedoso y profundo.
Los participantes dejaron la Asamblea con ganas de hacer realidad el lema: “Comunidades nuevas para tiempos nuevos”. Han salido convencidos de que el Espíritu les dirigió pues “ardían los corazones” en la medida en que se sentían cada vez más hermanos entre los hermanos y entre los laicos y laicas.
Los ejercicios presentados: escucha del otro, encuentro con nuestro tiempo y con nuestras historias, encuentro con el “otro-Otro”, con Jesús y con el mundo, para una transformación desde el corazón, teniendo en todos ellos de fondo, las comunidades, ayudaron a convencer a los participantes de que otra manera de vivir en comunidad, en fraternidad es posible.