24 de marzo de 2009 MALAWI

Una entrevista con el equipo de Manziana

El Programa Horizontes, que se ha estado sucediendo en Nyungwe, Malawi, desde mediados de enero 2009, ha terminado el 12 de marzo de 2009. Los hermanos John Bwanali y Arthur Ganiza entrevistaron a los dos hermanos que están encargados del programa: Barry Burns, de Nueva Zelanda, y Antoine Kazindu, de Rwanda.

Hermanos, ¿porqué se llama Horizontes este programa y qué lo ha hecho necesario?
?Horizontes? es un programa que la Comisión de Vida Religiosa ofrece al Instituto. Su objetivo es consolidar la vocación de los hermanos jóvenes adultos que han hecho profesión perpetua ? con una edad entre 30 y 40 años ? para quienes este programa puede ser provechoso.
Puede considerarse como una respuesta al deseo profundo de una ?realización enraizada en el ideal religioso? (FG 381) en esta etapa particular de la vida.
Es el fruto de la reflexión y revisión de nuestra formación permanente. Respondiendo al XX Capítulo general, el Consejo general organizó una ?Revisión de los Programas de Formación Permanente? en 2006. Los Provinciales, los participantes de los últimos programas de renovación y los Equipos de Renovación participaron en esta revisión por medio de una encuesta.
Esta revisión mostró claramente que en muchas provincias del Instituto no hay nada organizado entre el tiempo de la profesión perpetua y el programa de la edad mediana. .

¿Cuáles fueron las esperanzas iniciales?
Este nuevo programa fue creado principalmente para afianzar el crecimiento vocacional y la identidad marista y religiosa. Es una necesidad real en algunas unidades administrativas del Instituto.

¿Cómo describiría su experiencia en Nyungwe en relación con el programa Horizontes?
Nyungwe, es un lugar especial en cuanto a su localización y a su clima muy variable. Cuando llegamos, nuestra primera impresión fue negativa; un lugar aislado entre las Colinas. Nos llevó varios días habituarnos a él hasta hacerlo verdaderamente nuestro hogar para las nueve semanas que nos quedaban por delante allí.
Más tarde, nos dimos cuenta que el hecho de estar aislados lo hacía un lugar ideal para la reflexión personal y la oración. No hay actividades ni lugares atractivos cerca. Era definitivamente entre los mejores lugares para el programa Horizontes. Lilongwe o Blantyre podrían haber ofrecido más ventajas, pero también más inconvenientes.

¿Por qué se redujo el número de participantes a la mitad del número que se había fijado como objetivo?
Siendo el primer programa organizado en África, hubiera sido estupendo si hubiéramos tenido un mayor número de participantes. Sin embargo, ya es muchísimo que una Provincia haya podido enviar siete hermanos. ¡Es encomiable!
Debido a los diferentes calendarios escolares de las diferentes partes de África, es difícil encontrar el mejor tiempo para todas las unidades administrativas. Felicitaciones a la Provincia África Austral por haber hecho un gran esfuerzo al haber liberado a un buen número de participantes

¿Cuál es la diferencia entre tener el programa en Nyungwe y tenerlo en Manziana, Italia?
Para el equipo, la diferencia en muy grande, porque Manziana es nuestra casa y todo está preparado para recibir a los hermanos que siguen los programas de renovación. Cuando los hermanos llegan a Manziana, les recibimos, no solamente al programa, sino también a nuestra casa: un lugar familiar para nosotros.
Tener el programa en Malawi (Nyungwe) tiene la ventaja de rebajar los gastos y satisfacer las necesidades reales de los participantes. Es por eso por lo que fue elegido, en colaboración con los Provinciales. Para este primer programa, el H. Lawrence ayudó a encontrar algunos conferenciantes importantes, familiares con el contexto y la cultura.
Muchos de los participantes perdieron menos tiempo en adaptarse al nuevo ambiente. Ahorrando así energía que se hubiera gastado inútilmente al comienzo y durante el programa. Quizás esto facilitó la integración de los participantes en las diferentes actividades.

Desde su punto de vista, el programa ¿alcanzó los objetivos prefijados y las expectativas iniciales?
Por lo que respecta a las dinámicas de la comunidad, la integración de los participantes en el programa y la calidad de los conferenciantes, podemos decir que los objetivos se lograron.
En cambio, es difícil hablar de los cambios reales y duraderos que tienen lugar durante un programa de sólo nueve semanas. Pero estamos seguros que el programa ha sembrado algunas semillas.
¿Qué recomendaría a nuestros Superiores en cuanto a futuros planes de programas como éste?
* Encontrar un lugar adecuado donde 2 ó 3 Provincias puedan enviar participantes fácilmente.
* Explicar muy bien a los hermanos y a las comunidades la naturaleza del programa, pidiéndoles una respuesta clara.
* Nyungwe está muy lejos de Lilongwe, especialmente para los conferenciantes que vienen de fuera de Malawi.
* Este programa permite a los hermanos conocerse mejor y así ampliar los horizontes de nuestra vocación, misión y vida comunitaria. Sería beneficioso que más hermanos entre 30 y 40 años tengan la oportunidad de participar en el programa.

¿Desean hacer algún otro comentario?
* Siendo el primer programa de esta clase, no nos imaginábamos cómo los hermanos lo aceptarían. La única referencia que teníamos era la evaluación del equipo de El Escorial que dirigió el año pasado el primer programa Horizontes en el Instituto.
* Dado que algunos participantes ya se conocían, los primeros días fueron fáciles y tranquilos.
* Muchas gracias a la Provincia de África Austral que tomó la responsabilidad de acoger el primer programa de esta clase en África. Ha sido una experiencia enriquecedora.

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