9 de septiembre de 2005 SRI LANKA

¡Un tiempo para tomar decisiones!

Discurso inaugural del hermano Seán Sammon
<270.jpg alt=Discurso inaugural del hermano Seán Sammon >El discurso programático con el que el hermano Seán Sammon, Superior general de los hermanos maristas, ha iniciado la VII Conferencia general, presentado a los hermanos con el título ?¡Un tiempo para tomar decisiones!?, propone tres áreas de trabajo prioritario para los próximos cuatro años: identidad, misión y liderazgo.
Al dirigirse a los Provinciales y Superiores de distrito reunidos en Conferencia general en Negombo, Sri Lanka, del 5 al 30 de septiembre de 2005, ha destacado que de todos los momentos por los que ha atravesado la renovación del Instituto, solicitada por el Concilio Vaticano II, el momento actual es más peligroso que ningún otro en el cual nos hayamos encontrado en los últimos 40 años. La causa de esta peligrosidad está en el tipo de decisiones que hay que tomar como dirigentes del Instituto. Hace cuarenta años se tomaban decisiones sobre la renovación de la vida religiosa. Hoy hay que tomar decisiones sobre nuestra identidad.

Identidad
Los miembros del 20º Capítulo general nos desafiaron a clarificar la identidad tanto del hermano como la del laico marista. Para formar una identidad o reformar la anterior hay que realizar opciones y comprometernos con los valores vividos o bien elegir otros nuevos.
Más delante, señala el hermano Superior general, dos impedimentos para llevar adelante opciones que afirmen claramente nuestra identidad.
Primero. Nuestro respeto por la diversidad que ha sido exagerado y más bien nos ha paralizado. Las diferencias internas han crecido mucho en algunas regiones. Dado el caso de que continúen las diferencias de perspectiva en lo referente a los votos, al lugar y significado de la vida comunitaria, a la espiritualidad, al trabajo apostólico, a los pobres, a la formación, llegarán a ser muy difíciles, si es que no imposibles formar una identidad común y dar un testimonio como grupo.
Segundo. El miedo a pensar que adoptar nuevas prácticas que nos identifiquen sería regresar al pasado. Necesitamos encontrar nuevos signos que definan nuestra identidad y esta tarea la tenemos que realizarla juntos. Los consejos evangélicos, así como los ideales de amor a Dios, la preocupación apasionada por los pobres y necesitados, el compromiso con la vida comunitaria, debería ser traducido en una única manera marista de ser, manifestada en comportamientos y prácticas que sean claros y comprensibles para los demás.

Misión
Con relación a la misión afirma el hermano Superior general que se encuentra en el corazón de nuestra identidad. Existe sólo una misión, la misión misma de la Iglesia: proclamar el Reino de Dios y su inminencia. Nuestras obras apostólicas son parte de esa misión y se dirigen a un grupo específico de personas: los jóvenes y, entre ellos, los pobres. Los miembros de nuestro 20º Capítulo general nos recordaron que tenemos que llevar a cabo una evaluación valiente de las obras apostólicas que hemos atendido durante las cuatro últimas décadas. Además los capitulares nos llamaron a salir de nuestras oficinas para entrar más en contacto con los jóvenes. Hay muchas obras valiosas pero no son las obras de los Pequeños Hermanos de María fundados por Marcelino Champagnat.

Liderazgo
Líder no es el buen gestor o el buen administrador sino quien ayuda a los otros a soñar como lo hizo Champagnat. Los jóvenes que el Fundador reunió en torno a sí percibieron que les proponía algo por lo que valía la pena entregar sus vidas.
El hermano Superior general ve que hay signos optimistas en el horizonte y vivimos momentos de acción audaz. Pero existe también la necesidad de modificar la manera como ejercitamos la autoridad. En algunas Unidades Administrativas el Provincial o el Superior de Distrito se ha convertido sólo en coordinador, encargándose de mantener el bienestar y agrado de todos. Y en otros lugares apenas se está ejerciendo la autoridad. No nos basta con ser gerentes efectivos, o asegurar una presencia pastoral, o incluso ser hombres de oración. Debemos tomar la responsabilidad del trabajo en conjunto de nuestro Instituto presentando a nuestros hermanos y a nuestros colaboradores laicos, a la iglesia y al mundo, una visión más amplia que sea capaz de guiarnos.
El hermano Superior general agradeció a los hermanos presentes en la Conferencia por todo lo que están haciendo en favor de los hermanos, del Instituto y de la Iglesia. Y concluyó su alocución diciendo: Veo con ilusión estos días que pasaremos juntos donde tendremos la ocasión de fijar el curso de los próximos cuatro años.

Reflexión personal del documento
Con esta propuesta de reflexión del hermano Superior general se abren los trabajos de la Conferencia para elaborar propuestas y directrices para los próximos cuatro años hasta la convocatoria del 21º Capítulo general.
Se entrega a cada uno el texto escrito y traducido a cuatro idiomas y se les invita a mantener un clima de interiorización para acoger los dones que el Señor quiera regalarnos y la gracia que se busca al leer con detenimiento el texto. Es muy importante que cada uno de los participantes se haga consciente de dónde se encuentra existencialmente en este momento. Se recomienda dirigir la atención hacia los signos de vitalidad en el Instituto.
Toda esta reflexión quiere desembocar esta tarde en un crecimiento de la visión unificada de las llamadas del 20º Capítulo general. Para ello se les propone a los participantes en la Conferencia que revisen las llamadas capitulares para detectar si hay nuevos matices.

Puesta en común
Después del período de tiempo que dedicaron los hermanos a releer el discurso del hermano Seán se le hicieron preguntas acerca del alcance que quiso dar a algunas afirmaciones que contiene su discurso.

Se le preguntó por qué interpreta él que este momento que estamos viviendo es el más peligroso de cuantos hemos vivido en los últimos cuarenta años. Afirmó que las decisiones que podamos tomar actualmente sobre formación, comunidad o gobierno, por ejemplo, van a tener unas repercusiones determinantes. Históricamente las decisiones de hace cuarenta años concernían a la renovación de la vida religiosa. Las que se tomen en estos momentos afectan a la identidad de los maristas. Hay jóvenes en el Instituto que están engendrando una gran espiritualidad. Desean que se les ofrezca una propuesta por la que valga la pena entregar la vida. Las ofertas de lo documentos son claras y nos las creemos, pero no manifestamos con claridad la identidad.
Las intervenciones de los hermanos destacaron algunos criterios para reforzar el sentido de fraternidad de nuestra comunidades. Somos hermanos, pero no hay que darlo por supuesto. También se aludió al fenómeno del cambio estructural que está viviendo el Instituto. Para algunos el cambio es un enemigo. Pero es una realidad que hay que asumir gozosamente.

Las tareas de la tarde de hoy
El recurso utilizado en la reflexión de la tarde ha sido la síntesis de las respuestas al cuestionario enviado a los Provinciales por la Comisión preparatoria de la Conferencia general con relación a las grandes llamadas que hizo el 20º Capítulo general. Se han recibido las respuestas de todas las Unidades Administrativas. En un cierto número de Unidades, son los hermanos Provinciales o los Superiores de Distrito quienes han respondido personalmente; en otros, la respuesta viene del Provincial y de su Consejo.
Acerca de la primera llamada capitular se detecta en las 31 respuestas de la encuesta una unidad impresionante, sin que se noten diferencias significativas en ellas, por ejemplo, por continentes. Hay expresiones fuertes que prácticamente aparecen en todos los informes. Por ejemplo las siguientes: Respecto de la primera llamada: ?centrados en Jesucristo? se dice: ?Esta llamada es actual, urgente y necesaria. <270a.jpg alt= Recordando a Brasil en su día nacional hspace=5 vspace=5 align=right>Es nuestra razón de ser. Es un punto esencial en nuestras vidas. Debería decir lo esencial de nuestra identidad y aparecer como testimonio ante el mundo. La gente debería ver en nosotros a hombres de Dios marcados por la presencia de Cristo. No vivir esta llamada es no dar sentido a nuestra vocación, nuestro apostolado y nuestras relaciones. En esta llamada encontramos las raíces de nuestra Espiritualidad Apostólica Marista. A la inversa, si la vivimos, nos conducirá a hacer de Cristo el centro de nuestras vidas.?
Con este documento se ha trabajado en un primer tiempo dedicado a la lectura personal, para pasar a compartirlo juntos en un segundo momento.

Recordando a Brasil en su día nacional
Las sesiones del día de hoy comenzaron con un saludo cariñoso y sincero para todos los hermanos brasileños presentes en la Conferencia. Hoy en Brasil se celebra la fiesta nacional.
El hermano Claudino Falchetto, Provincial de Brasil Centro-Norte, resumió en breves palabras el significado que ese día tiene para Brasil. Y a continuación todos los presentes recibieron un pequeño recuerdo. En la oración comunitaria se recordó a cuantos trabajan o participan en las obras educativas que los hermanos animan en ese gran país.


Una Ecclesiología desde Asia. Continuación (II)

Leer 1

Continuamos aportando una síntesis de la amplia intervención del P. Aloy Peiris, S.J. sobre los retos que plantea Asia para la Iglesia.
El objetivo de eliminar el analfabetismo es una meta de la Naciones Unidas para el año 2025. La mitad de los adultos de Asia meridional no saben leer ni escribir y una cuarta parte no tiene acceso a la educación de base. Cualquier programa educativo serio debería ser radical y eliminar el ciclo de la pobreza y el analfabetismo y sus consecuencias, como la explotación de mujeres y niños. Aquellos aventureros de entre nosotros que se atrevan a tomar la educación básica de los niños como su misión sagrada tienen en sus manos el porvenir de Asia. El analfabetismo de la mayoría es el sacrificio humano que hoy se ofrece en el altar de Mammon a cambio de la riqueza producida por los dirigentes mundiales.
En cambio, el tipo de cristianismo aparecido con la revelación del Dios de Moisés como el Padre de Jesús no toleraría ninguna forma de creación de riqueza que fuera al mismo tiempo la multiplicación de la pobreza de las masas. Sino que exigiría que cambiáramos las políticas y las técnicas de educación de forma revolucionaria para permitir a los más pobres participar en la producción de riqueza sin permitir que otros roben el fruto de su trabajo.

La nueva instrucción crea nuevas formas de pobreza
La educación de base sirve para que el estudio de la lectura, la escritura y la aritmética en su propia lengua materna permita la emancipación de las masas. Pero la tecnología utilizada ha sido monopolizada por la tecnología electrónica. Que utiliza el inglés como medio de comunicación. Un obrero de Bangladesh tiene que trabajar ocho años para conseguir un ordenador que un estadounidense puede adquirir con el sueldo de un mes. La meta del año 2025 será irrealizable pues el acceso a estas formas de instrucción excluirá cada vez a más gente.

Ciencia ? técnica y religiones de Asia
La capacidad técnica del hombre para mejorar su suerte sobre la tierra no ha sido descubrimiento europeo, sino oriental. Europa ha aprendido de Asia, en cambio se dice que Asia está atrasada. Asia ha unido siempre la sabiduría religiosa con la ciencia y la técnica, en cambio Europa ha separado ciencia y fe con consecuencias desastrosas.
El mundo espera hoy una rara especie de hombres que unan ciencia y fe. Ese será el momento del encuentro del Oriente con el Occidente.

El Magisterio y los pobres
El ideal de las primeras comunidades cristianas era el de compartir para eliminar tanto la clase de ricos como la de pobres. Dios escoge a los pobres no porque son santos sino porque son pobres. Llegan a ser santos cuando acogen y viven la llamada de Dios para unirse a Él y construir una sociedad donde reine solamente Dios. La misión de enseñar a todas las naciones o educar a las naciones, que quiere decir también evangelizar a los gentiles, reafirma la llamada a la santidad. Pero el pueblo es infiel y copia las prácticas sociales injustas. Lo mismo ocurre entre nosotros los cristianos.
Tres principios tendrían que guiar la educación cristiana: Educación (evangelización) ?por? los pobres, educación (evangelización) ?de? los pobres Educación (evangelización) ?de los ricos por los pobres?.

Ciencia y técnica unidas en la educación a favor de los pobres
El padre usó en su conferencia el ejemplo de Latinoamérica donde los pobres han descubierto en la Universidad Centroamericana UCA a un grupo de hombres de una fe capaz de mover montañas al mismo tiempo que se dan cuenta que el invasor cultural también es cristiano. Los profesores cristianos de la UCA proponían que toda actividad universitaria o no universitaria debía tener un efecto sobre la sociedad en general sobre todo sobre los no instruidos. Este modelo quería ir más allá del modelo occidental liberal. El error que corrompe nuestras intenciones apostólicas consiste en no nser conscientes de la conexión perniciosa que existe entre la educación liberal sin conciencia social dada a las clases privilegiadas y los servicios sociales sin educación liberadora.
El reto del proyecto educativo y social que tiene la educación cristiana es el de ofrecer un servicio educativo que libere a los pobres y a los ricos. A los pobres de su pobreza y a los ricos de su riqueza.

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