Una llamada y una responsabilidad
Desde el viernes, 14 de febrero, el grupo de hermanos que siguen el programa Horizontes en Nyungwe, Malawi, acogieron al H. Teófilo, de Roma, como conferenciante sobre el tema de la espiritualidad marista. Para algunos hermanos era un primer contacto con el documento ?Agua de la Roca?. El H. Teófilo permaneció con nosotros hasta el lunes por la tarde. A pesar del breve tiempo, fue capaz de presentar el documento con claridad y de una manera muy sistemática. ¡Bravo!
El martes, después de su partida, continuamos estudiando el documento por medio de un trabajo personal. Siguiendo las recomendaciones de la comisión -?No intentamos que el documento sea un texto para leer, sino un compañero para nuestro caminar espiritual?- concluimos el estudio del documento con un día de retiro. Fue una oportunidad maravillosa para leer pausadamente y usar el documento en la oración.
Nos sentimos muy agradecidos por la presentación del documento. La pasión y la experiencia del H. Teófilo nos hicieron vivir los elementos de nuestra espiritualidad y estimularon en nosotros un interés por la misma y la necesidad de compartirla con otras personas.
La introducción, que explica cómo leer el documento, es muy importante. Es fácil perder su riqueza y su unidad cuando uno no sabe cómo fue escrito el documento y el significado de los símbolos usados. Estamos ahora firmemente convencidos que saber, vivir y compartir nuestra espiritualidad debe estar en el corazón de cada Hermano Marista. Pensamos que el compartir puede tomar varias formas: foros, talleres, oraciones, retiros? según la realidad y las necesidades de las personas con quienes nos relacionamos.
Entre las reflexiones que algunos hermanos hicieron sobre la experiencia con el H. Teófilo podemos mencionar:
?Me impresionó la charla: ?un laico, o un hermano, son pan para compartir.? Según pasaba el tiempo me fui dando cuenta, por la meditación, que María y Marcelino eran pan para compartir. Por eso estoy llamado a ser pan para ser compartido con mis hermanos y hermanas
?Había visto el libro antes, pero nunca reflexioné profundamente sobre su contenido. Ahora me doy cuenta que tengo un tesoro entre mis manos. Los temas tratados son fundamentales para mí. Me proporcionan otra oportunidad de centrarme y dirigir mi llamada (vocación) y no aferrarme a estructuras sin base; debo ir más lejos, mientras rejuvenezco mi vida como hermano marista
Un hermano resumió el programa ?Horizontes? como una ?vuelta a las raíces?. Una manera de estar en contacto con nuestras raíces es encontrar nuestra alegría viviendo nuestra espiritualidad. Sí así lo hacemos, podemos encontrar un significado profundo en nuestra búsqueda espiritual? profundizar nuestra identidad marista.
El estudio de diferentes pasajes relacionados con Dios, María y Marcelino nos ayudó a descubrir la imagen de Dios, de María y de Marcelino retratadas en el documento.
A un hermano le gustaría que se quitara la expresión ?espiritualidad de la sencillez? y, en su lugar, se usara simplemente ?sencillez?, porque, en su opinión, la inclusión de la palabra ?espiritualidad? la separa de otros pilares y hace de ella una espiritualidad separada del resto.
Estamos concluyendo el programa ?Horizontes?. La llamada a compartir nuestra espiritualidad permanece aún en nuestros corazones. Es nuestra razón de ser en la Iglesia y, por supuesto, responsabilidad nuestra. ¡Magníficat!