Mensaje de los participantes en el programa Espiritualidad del Corazón

De 31 de enero a 22 de febrero, 51 participantes han estado en Florianópolis, Brasil Centro-Sul, en el programa Espiritualidad del Corazón, organizado por el equipe de formación permanente del Instituto. Los participantes han querido, al final, compartir con todo el Instituto este mensaje que reproducimos en seguida (Fotos en Facebook).

A final de la experiencia vivida en Florianópolis durante el programa Espiritualidad del Corazón, los 51 laicas, laicos y hermanos procedentes de distintas provincias del Instituto de habla portuguesa y española, acogemos con apertura de corazón la pregunta: “¿Qué sueño tiene Dios para el carisma marista en nuestros días y en el futuro? Y, ¿cuál es el papel que estamos llamados a desempeñar en ese sueño?” (Cfr. Hogares de Luz) para dejar brotar de nuestros corazones agradecidos algunas intuiciones que guíen nuestras vidas y nos orienten para seguir creciendo en nuestra vocación y en la espiritualidad:

Nosotros, laicas, laicos y hermanos, Maristas de Champagnat:

• Nos sabemos buscadores de Dios, lo cual nos inspira a vivir una cultura del cuidado – de nosotros mismos, de los demás y de nuestra casa común.
• Deseamos vivir conectados y conscientes de la presencia constante de Dios en nuestras vidas y en nuestra historia.
• Nos sentimos llamados a cultivar una espiritualidad del corazón encarnada e inspiradora, que sea sal y luz ahí donde estamos.
• Queremos ser como una antorcha de Dios que arde desde la disponibilidad y la búsqueda interior, avivada por el silencio y la escucha, que ilumine nuestra vocación de estar presentes entre los niños y jóvenes.
• Tenemos el anhelo de ser instrumentos multiplicadores, cuidando la interioridad y propiciando experiencias de búsqueda y encuentro con Dios.
• Deseamos seguir experimentando y dando testimonio personal y comunitario del amor, la compasión y la ternura de Dios través de nuestro corazón de discípulas y discípulos de Jesús.
• Creemos que hoy es necesario construir puentes y establecer conexiones significativas entre nuestras vidas y lo que necesita el mundo, entre lo que experimentamos en lo profundo de nuestro ser y las personas cercanas a nosotros, en cada comunidad y en la casa común.
• Soñamos transformar la experiencia de amor con Dios en un diálogo de corazón a corazón con nuestros hermanos y hermanas.

Y Porque deseamos que nuestras vidas estén centradas en el seguimiento de Jesús vivemos apasionadamente el Evangelio para ser:

• Rostro cercano de la misericordia de Dios expresado en cercanía, acompañamiento y compromiso, especialmente con los más necesitados y vulnerables que están en los márgenes de la vida.
• Maristas de corazón abierto y apasionados por el carisma que hemos heredado.
• Comprometidos en la entrega de nuestro ser en favor de la construcción del Reino de Dios desde los pequeños detalles y al estilo de Champagnat.
• Desarrollando una actitud de compasión y alegría, siguiendo las huellas de María y Marcelino.
• Privilegiando la formación y educación en la interioridad a través de la experiencia y el reconocimiento de la presencia de Dios que nos habita y nos trasciende.
• Promoviendo experiencias e iniciativas para el bien de los demás, ser felices y hacer felices a los que encontremos en nuestro camino.
• Viviendo una actitud de escucha atenta como María, nuestra Buena Madre, que nos acompaña en el seguimiento de Jesús, y nos llama a cuidar con un corazón lleno de afecto y respeto, a los niños y jóvenes empobrecidos y vulnerables.

Para lo cual seguiremos buscando los medios necesarios para cultivar una espiritualidad del corazón, centrada en Cristo, que nos llena de alegría y nos hace inclusivos y nos ayude a conectar con nuestros orígenes maristas.

Florianópolis, 22 de febrero de 2024