Nuevos hermanos de Zambia, Zimbabuwe e Malawi
El 17 de noviembre de 2007 será recordado como un día significativo en la historia del noviciado de Matola. En esa fecha pronunciaron los primeros votos diez hermanos, a saber: Samson, Padington y Tererai, de Zimbabwe; Benjamin, Bernard, Peter, Osward y Witman, de Malawi; y Ascensio y Reuben, de Zambia. Dado que esperábamos numerosos visitantes, tuvimos que pedir a las religiosas vecinas que nos permitieran celebrar la ceremonia en su casa, que es muy espaciosa. Nuestros graduados, que se habían congregado en un aula aneja, entraron procesionalmente en fila en el salón multiusos, vestidos con sus capulanas. Era fascinante ver al público asistente a la expectativa de lo que iba a venir después. El misterio se desveló cuando los neófitos se situaron delante del altar para hacer su profesión. Todo era hermoso y lleno de color. Siete sacerdotes concelebrantes presidían la ceremonia litúrgica.
El H. Lawrence, nuestro Provincial, recibió los votos de los jóvenes. Era la primera que lo hacía en persona, ya que el año anterior había delegado esa función en un consejero.
Como suele ser costumbre, una vez terminada la misa hubo tiempo para felicitaciones y saludos. De ahí pasamos a la comida de fraternidad, en la que no faltó el momento de cortar la tarta y la entrega de obsequios de recuerdo a los recién profesos.
El acto final fue un espectáculo de danzas autóctonas a cargo de un grupo de ?amigos de Champagnat?, que nos entretuvieron hasta las siete de la tarde. Los bailarines estaban dirigidos por Mr. Elias, un vecino con el que tenemos muy buena relación y al cual acudimos de cuando en cuando.
Con motivo de la profesión hubo gente que vino desde Malawi y Zambia. Todavía estamos rumiando los bonitos recuerdos de esa jornada, que no se nos borrarán fácilmente de la memoria debido a los diversos símbolos de inculturación que acompañaron toda la ceremonia. Deseamos a nuestros jóvenes profesos una grata visita a sus familias, y una fraternal experiencia de comunidad, antes de que se trasladen al MIC, entrados ya en el nuevo año. Vaya nuestro agradecimiento para todos los que contribuyeron con entusiasmo a convertir ese día en una jornada inolvidable, así como a los muchos amigos que nos brindaron su apoyo moral. Y, por supuesto, también a todos vosotros, que nos acompañasteis con vuestras oraciones desde el momento en que os comunicamos la noticia de la profesión que íbamos a celebrar. Los siete hermanos de Malawi y Zambia partirán mañana mismo de aquí, y los tres de Zimbabwe lo harán el lunes. Pedimos al Señor que les dé un buen viaje y una agradable estancia con los suyos. Quedamos unidos en la oración. Que Dios os bendiga a todos.
Simeon Banda, fms.