Ya no novicios, sino hermanos
Tuvimos una ceremonia colorista en el noviciado internacional de Matola, Provincia de África Austral, con motivo de los primeros votos de seis novicios, a los que acompañaban cinco sacerdotes, diecisiete hermanas, más de veinte jóvenes del grupo San Marcelino y numerosos seglares.
Ellos son los Hermanos: Antonio Jamal de Mozambique, Cosmas Chembe, Alexander Chimera, Richard Chidothi y Crisple Mkwani de Malawi y Eugine Chimba de Zambia. Ciertamente, este 18 de noviembre quedará grabado en sus mentes como su día de Galilea al seguir a Jesús tras las huellas de San Marcelino.
El Padre Amerigo, capellán, les recordó y nos recordó a todos, que debemos estar bien arraigados en nuestra vocación. Subrayó que hoy la perseverancia se está convirtiendo en un tema de gran preocupación para la mayoría de nosotros aquí en África, ya que se están esgrimiendo argumentos como el de ser el primogénito, o el único en la familia que se ha formado, para pedir la dispensa de votos cuando la fase de luna de miel de la vida religiosa ha concluido. Y les lanzó el desafío de aferrarse a la oración seriamente cuando se hacen sentir las tormentas de la vida y acordarse de que Él estará siempre allí para protegerles.
El salón estaba abarrotado de grupos de religiosas, jóvenes y seglares, cuya participación activa se notó al acabar la comida. Hubo buenos consejos para los recién profesos en medio de un foro de intervenciones abiertas. Espero que ellos recuerden siempre estas palabras mientras caminan por la senda marista.
Deseamos muchos ánimos a estos jóvenes hermanos, y que amen y disfruten de su nueva vida, para que puedan ayudar a muchos jóvenes a acercarse a Jesús.
Simeon Banda, fms