Acción de gracias por los 70 años de presencia marista en Vale Drummoyne
Celebración de la acción de gracias por los 70 años de presencia marista en la antigua casa de Drummoyne, lugar que al principio fue un escolasticado, luego la residencia oficial de 10 provinciales, la sede de una escuela marista y un centro administrativo de la Provincia, pero ha sido, sobre todo, un hogar para muchos hermanos.
Tras setenta años de pastoral, la comunidad de Drummoyne Sydney ha cerrado, y la casa y la propiedad han sido vendidas.
El sábado 4 de julio, con una sencilla liturgia y un almuerzo, se recordó a todos los visitantes y sus anfitriones. A lo largo de setenta años, más de 120 Hermanos han formado parte de esta comunidad. Su pastoral ha concluido ahora.
Historia de la comunidad en Drummoyne Sydney
A finales de 1950 se compró un hermoso edificio construido a fines de la década de 1890, por donde pasaba el río Parramatta. El propósito inicial era que la comunidad sirviera como Escolasticado para las Provincias y Sydney y Melbourne. Y así fue por un par de años. Durante ese periodo, los primeros Hermanos de las Islas Salomón estudiaron aquí.
En 1978, con la apertura de un Escolasticado en Dundas, que era un inmueble mucho más grande en otro suburbio de Sydney, la misión de la comunidad cambió y se convirtió en la Casa Provincial de la Provincia de Sydney. Los dos primeros Provinciales fueron Hilary Conroy AG y Quentin Duffy VG. Y posteriormente, fue el hogar de Charles Howard SG.
En 1960, con la rápida expansión de las escuelas maristas en la provincia, se necesitaba apoyo para las escuelas. Un pequeño grupo de Hermanos tenía como sede Drummoyne mientras visitaban las escuelas, enseñaban las lecciones y alentaban a los maestros. Con el tiempo, se construyó un espacio adicional en aquí, pero durante este siglo, el equipo de apoyo a la comunidad y la pastoral en la Provincia de Australia aumentaron y superaron el espacio de Drummoyne. El Centro Provincial se trasladó a Mascot, cerca del aeropuerto de Sydney, al igual que el Provincial.
Como residencia del Provincial durante décadas, la comunidad de Drummoyne fue un hogar acogedor y solidario. Del mismo modo, la comunidad brindó acogida y hospitalidad a muchos visitantes extranjeros. Durante décadas, Maristas de diferentes lugares, fueron recibidos con alegría en esta comunidad. Muchos, de ellos conservan agradables recuerdos de las tertulias alrededor de la mesa del comedor de Drummoyne.